Noqueado

Golpe de mar

 

La pluma estremece en su aullido 

tinta china que mis manos hoy refugian,

tatuajes sin cita ni boceto,

bellos…

 

- accidente con víctimas fatales -

 

Esta madrugada mis tripas aprovechan para hacer pulsos de pulgares

con alacranes enfadados.

 

Arrancó todas puertas, las ventanas 

 

                                               de su verano 

 

para poder quemar leña 

    

                                             en mi invierno.

 

Recogeré de aquí y allá las tierras raras;

la fragua ya bien alimentada

me llama…

 

- ¡¡¡soplar!!! -

 

A repartir, dos dignas facas.

Ilusiones de los rencores de sí mismos, para culminar un seppuku 

si algún mañana este cielo

 

                                 nos quisiera desterrar.

 

Mis negras mariposas perdieron su cobijo

 

- nicho - 

 

han salido todas por la abertura del desván. 

 

Sereno, recibí la dosis justa de verdad.

Jeringuillas que disuelven en mi herrumbroso, mar granate

 

                                     siempre en resaca

 

pura, sin cortar, de su laboratorio

 

- clandestino -

 

La miel de su dolor y su pesar y tantos otros putos muertos detrás de la pintura nueva de su hogar.

 

Contenido en las mazmorras de sus cromos impresos en la lava de su química

 

- a 1200, básica -

 

mis delirios de pecados bailan con la libertad más exaltada.

 

Una gota de agua 

                              sobre el film

 

                    de la darbuka en batucada. 

 

Altivo, estoy en su pedestal

Aquí no se permite flaquear.

 

Tiburón que huele carne

nada y nada sin cesar.

¿Si su presa lo deja sin cenar?

Supo ser escuálido escualo…

El desahogo de su varada

 

                              cerrará sus ojos.

 

- en paz -







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