Las armas de la poesía las carga el diablo

Alfonso J Paredes

Ya nunca espero nada exuberantemente personal,
pero se siente y se nota en la conciencia,
como un tigre que es, como un ciego que no ve,
como el pronto de la inocencia.
 
Cuando de frente la ves venir
el oscuro talle de la parca mirándote a la cara,
no te lo puedes callar y cantas por soleares
de aquí para atrás cada una de las verdades.
 
Se recitan grafemas
que abren los ojos a los que no miran
quieren ver, quieren saber,
reclaman justicias para esos que exageran.
 
Tan pronto como pueden,
tan rápido como las balas,
se dan de frente la verdad de la verdad
y cantan sinceramente.
 
Versos para comer, necesarios para el hambre,
con el sudor de tu frente,
como el necesario oxígeno que inhalas a cada instante
que nos hace sentir, poema que magnifica.
 
Golpe a golpe, que nos recuerda nuestra existencia
la que nos dice quiénes somos y de dónde venimos.
No podemos rimar sin haber blasfemado o elogiado,
llegando hasta el final.
 
Me irritan los poetas que presumen de grandeza,
nunca podrán ser naturales,
te miran por encima y se evaden,
me fastidian los poetas que no se implican con los mortales.
 
Siento pena por ellos y vergüenza ajena,
empatizo y de rabia lloro cundo canto
estrofa tras estrofa, un poema más allá de la pena
que me embarga y rodea con mi llanto.
 
Si pudiera remover conciencias y hacerlas mover.
pongo toda intención para que ello ocurra.
soy como la llama de un grafema
que se quema con otras llamas de igual arder.
 
Sin orgullo desmesurado es mi poema,
al mismo tiempo que la unión inseparable
de las balas endiabladas que cargan mis letras
con las que te apunto y te escupo al corazón.
 
No son versos pensados poco a poco,
no son bellos poemas ni mañanas lastimeras,
son cosas de la vida imprescindibles,
son sonidos que oímos y llevamos dentro.
 
Son canciones que todos tarareamos
como si lo hubiéramos toda la vida cantado,
son mucho más que lo que sentimos,
son rezos misteriosos que hemos olvidado.
 
Fdo.: Alfonso J. Paredes
SafeCreative/Copyright 2021
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Comentarios +

Comentarios3

  • Gianella (G.V.E.) 🌹

    Felicitaciones poeta, me gustó la finura, y a la vez, sencillez de tus letras reflexivas.
    Un placer leerte...
    Son mucho más cuando surge desde adentro, del conjunto de una naturaleza propia, de la pureza de las emociones, de sentimientos, de vivencias... fascinó leerte, gracias por compartir tan profunda reflexión.
    Saludos y abrazo
    Gianella (G.V.E.)🌹

    • Alfonso J Paredes

      Gracias a ti, por acercarte a leerme. Es un poema que pudiera levantar ampollas, pero nada más lejos de mi intención. Saludos cordiales.

    • Miguel Ángel Miguélez

      La poesía es un arma cargada de futuro V. 2.0

      La inspiración no está mal
      pero prefiero el original.

      • Alfonso J Paredes

        No me acabo de enterar. Aún así agradezco tu lectura y comentario. ¿Me podrías decir a qué original te refieres? porque te aseguro que este poema es originalmente mío. ¡Ah! ¿te refieres al poema de Gabriel Celaya?, porque si es así, no ha sido la fuente de inspiración para mi poema, no me he inspirado en otra cosa que mi misma reflexión sobre el tema de mi poema. He de confesar que hoy ha sido la primera vez que leo este poema de Gabriel Celaya «La poesía es un arma cargada de futuro». Mi poema lo ideé en el año 2021 y forma parte del poemario «Poem & Rhápsody. La fina piel de la cáscara».

        • Miguel Ángel Miguélez

          No lo dudo ni por un instante Alfonso. 🙂

          Es de Gabriel Celaya:



          LA POESÍA ES UN ARMA CARGADA DE FUTURO



          Cuando ya nada se espera personalmente exaltante,
          mas se palpita y se sigue más acá de la conciencia,
          fieramente existiendo, ciegamente afirmado,
          como un pulso que golpea las tinieblas,

          cuando se miran de frente
          los vertiginosos ojos claros de la muerte,
          se dicen las verdades:
          las bárbaras, terribles, amorosas crueldades.

          Se dicen los poemas
          que ensanchan los pulmones de cuantos, asfixiados,
          piden ser, piden ritmo,
          piden ley para aquello que sienten excesivo.

          Con la velocidad del instinto,
          con el rayo del prodigio,
          como mágica evidencia, lo real se nos convierte
          en lo idéntico a sí mismo.

          Poesía para el pobre, poesía necesaria
          como el pan de cada día,
          como el aire que exigimos trece veces por minuto,
          para ser y en tanto somos dar un sí que glorifica.

          Porque vivimos a golpes, porque apenas si nos dejan
          decir que somos quien somos,
          nuestros cantares no pueden ser sin pecado un adorno.
          Estamos tocando el fondo.

          Maldigo la poesía concebida como un lujo
          cultural por los neutrales
          que, lavándose las manos, se desentienden y evaden.
          Maldigo la poesía de quien no toma partido hasta mancharse.

          Hago mías las faltas. Siento en mí a cuantos sufren
          y canto respirando.
          Canto, y canto, y cantando más allá de mis penas
          personales, me ensancho.

          Quisiera daros vida, provocar nuevos actos,
          y calculo por eso con técnica qué puedo.
          Me siento un ingeniero del verso y un obrero
          que trabaja con otros a España en sus aceros.

          Tal es mi poesía: poesía-herramienta
          a la vez que latido de lo unánime y ciego.
          Tal es, arma cargada de futuro expansivo
          con que te apunto al pecho.

          No es una poesía gota a gota pensada.
          No es un bello producto. No es un fruto perfecto.
          Es algo como el aire que todos respiramos
          y es el canto que espacia cuanto dentro llevamos.

          Son palabras que todos repetimos sintiendo
          como nuestras, y vuelan. Son más que lo mentado.
          Son lo más necesario: lo que no tiene nombre.
          Son gritos en el cielo, y en la tierra son actos.





          Un abrazo.

          • Alfonso J Paredes

            Esa, esa, sí, la acabo de leer, la busqué en google. Es una maravilla de poema. Te aseguro que es la primera vez que la leo y mira que he leído a Celaya. Claro, ahora te entiendo, me extrañó tu respuesta, pues no me inspiré en otra cosa que mi reflexión. Gracias de nuevo. Saludos cordiales.

            • Alfonso J Paredes

            • Rafael Escobar

              Excelente retrato del momento de la inspiración, cuando el mundo se borra y solo quedan el poeta, su musa y su idea.
              Mis sinceras felicitaciones apreciado amigo y poeta. Fraternal saludo lleva mi sincero aprecio.

              • Alfonso J Paredes

                Muchas gracias, poeta Rafael, por tan inmerecido elogio. Me alegro de que te haya gustado. Saludos cordiales.



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