Tras las pistas de una causa volátil
los que estamos todavía empeñados en no cambiar
contra miles obcecados en lo contrario
todos acorde a un mismo plan,
y no existen guías al más allá:
hace falta coraje.
Hay tanta soledad
que llega uno a cansarse
de batallar y hacer desastres,
y no es acobardarse
si en la fría noche se desvanecen mis pesares.
No vas a conseguir persuadirme de elogios
que cuando estoy solo me como absorto
temblando bajo los efectos de tu hipnosis
sin código para pasar a mejores situaciones.
Me duplico: no soy yo el que corre
cuando un peligro se interpone...
Tengo el libro abierto por la página dos
desde que tú me conoces.
Te retengo bajo pliegues de esta niebla
que se aferra a los sentidos,
inconsciencia pasajera
que dará de sí los frutos a deshora
y así toda la vida es una jaula pura
donde se cuece nuestra ilusión
a bandazos contra las esquinas
de esta noche portentosa.
Si me pueden estas deudas sumergir
mis ofrendas pongo ante todo ante ti
y me mejoro solo de ver como sonríes...
- Autor: Haz Ámbar ( Offline)
- Publicado: 8 de marzo de 2023 a las 20:15
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 37
- Usuarios favoritos de este poema: José Luis Galarza, alicia perez hernandez, WandaAngel
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