Mientras la inocencia en tu vida,
se erguía solemne junto a otras,
cuánta naturalidad en ella! Qué
de gestos, distintos y esbeltos,
poseía, todavía hoja no humillada
por el peso hostil del mundo.
Con qué ojos, prohibidos ahora,
mirabas el esplendor de otros cuerpos,
su belleza, su anatomía, la perfección
de sus líneas, remotamente soñados
y admirados. Mas, desaparecida
la candidez, resta la pulcritud, y toda
su extrañeza, y toda su estupidez.
©
- Autor: Ben-. ( Offline)
- Publicado: 13 de abril de 2023 a las 01:23
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 28
- Usuarios favoritos de este poema: Lualpri, José Luis Galarza, alicia perez hernandez, Andrea🌙, MISHA lg, Classman, Miguel Ángel Miguélez, Mauro Enrique Lopez Z., ♦Crystal CG♦, Carlos Eduardo, Alberto Diago, Freddy Kalvo
Comentarios3
Muchas gracias a tod@s por sus puntuaciones y estrellas. Es muy alentador Abrazo!!
Bendita inocencia, en qué momento te marchaste... Si no lo es, parece una elegía. Muy bello y emotivo, Ben.
Un abrazo.
Gracias Miguel. Una de esas pocas veces en que se tarda un breve lapso en escribir...Un abrazo!!
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