En su alma tiene una pena
Que no puede disimularla:
No dejara descendencia en esta tierra
Arrebatándole esa dicha inmaculada.
Entre sus brazos no llevara un infante
Para acurrucarlo y para apapacharlo,
Sangre de su sangre y carne de su carne,
Fruto del amor fecundo y apasionado.
No oira el llanto de su niño
Ni se empaparan sus labios con canciones de cuna,
Asi lo quiso el destino impio
Y esta sera la razon de su amargura.
Noches enteras miro al cielo
Rogando al Creador por ese hijo que no vendra;
Quebranto y desolacion hay en su pecho
Y una tristeza mas grande que la inmensidad.
El sol no acariciara su frente
Ni el ruiseñor cantara en su balcon;
Ese niño que fue su anhelo mas ferviente
Hoy es un lirio que en el huerto se marchito.
El cefiro del austro se llevo sus suspiros
Y sus lagrimas las bebio el huerto;
Los astros dibujan el rostro de su niño
Y su gemido se escucha como un desgarrador lamento.
En su alma tiene una pena
Que no puede disimularla.
- Autor: nando_barra (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 30 de abril de 2023 a las 19:05
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 9
- Usuarios favoritos de este poema: nando_barra
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