Tú no mereces tanto amor, te déjo con tu propia confusión además,
Te devuelvo tu poca atención, y tu falta de compromiso, de la argolla hago devolución.
Te déjo a la deriva. Para que vivas tu vida. Para que con el tiempo recojas a golpes, lo que una vez sembraste, a puro tropezones.
yo se que el tiempo no es sabio pero si nuestro mejor aliado. Y se qué beberas a sorbos, y amargura tu propia locura; cuando recuerdes que me has perdido, ya yo me habre despedido.
Te dejo para siempre, y de una vez por todas me alejo. Te devuelvo la bofetada con tu cruel cinismo, ya me da lo mismo...
acompañada de tu vil encanto.
Aunque no merecias otra cosa más que, mi propio olvido,
Tú no sabe amar, y sólo destruye las flores a tu paso no siembras mas que rencor, mientras mi alma tw sabe amar.
Hoy me levante y recogi mis pasos y escuche tu voz, tus gritos son como alaridos.
Hoy recogí mi corazón herido,
pero mañana me levantaré sin perder mi encanto del condor herido.
llegó el día en que pueda sanar y sonreír sin perder mi fé, ya puedes partir.
No volveré quitarme los tacones y caminar descalza, para poder estar a tu altura falsa...
17 Dic 2019
Autor Viviana londoño.
- Autor: Viviana Maria Londoño Mazo (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 3 de mayo de 2023 a las 01:33
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 10
- Usuarios favoritos de este poema: Lualpri, WandaAngel
Comentarios1
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