Por la alta plaza y en la calle estrecha,
sobre adoquines que le roban al mar;
con este viento de poniente
rozándome inquieto al pasar.
En las obras, esqueléticas y desnudas,
por verdes parques al cruzar;
en la fértil piedra que perdura
como vieja guardia del lugar.
En mis pensamientos más profundos,
en mi mente cuerda y delirante,
por mi amor, jinete que vuela,
y en mi corazón palpitante.
En la zancada de cada paso;
prisionero de ti a cada instante,
en cada resquicio del alma
con mi trasiego caminante.
A la temprana mañana de invierno
te hago mi promesa primera,
y se arrastra mi terco delirio
a cada tarde de primavera..
Te despeinan los mismos vientos
que también pasan por mi vera,
perfumando con su fragancia,
la impaciencia de mi espera.
Yo te envuelvo tan adentro, vida mía,
como la raíz profunda ciñe al olivo;
como el vendaval se bebe a la tierra,
como el amor del que vivo.
En esta calmada mar, en sus hondas,
en este puerto furtivo
invisible creo verte pasar
y por dentro yo me desvivo...
- Autor: poetalibre ( Offline)
- Publicado: 5 de mayo de 2023 a las 07:55
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 21
- Usuarios favoritos de este poema: migreriana, MISHA lg, Texi
Comentarios1
Tú poema plasma la presencia de un noble sentimiento en todos los aspectos de la vida, pudiera ser introspectivo o hacia alguien muy querido , hay una devoción hacia el amor. Es profundo como esta metáfora " como la raíz profunda ciñe al olivo;".
Es suave y cadencioso a lectura
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