Ángel mortal

TezH

Ángel mortal.

Permites a los duendes soñar.

Eres el fugaz dial

de las noches estrelladas,

y el estrecho portal,

al donaire de las hadas.

Llegaste del oasis,

 y sin conocerme,

plantaste bandera,

en los confines de esta tierra

sin matices verdes. 

Y me extendiste la escalera,

al cielo de los poemas,

donde nos reencontraremos,

en el faro de la primavera,

y nos ataremos,

entre líricas de seda.

 

Nunca el pecho 

me latió tan fuerte,

Nunca di por hecho, 

que los mejores versos

los cocina la muerte.

Nunca quise encontrar la luz,

pero un Dios me levantó la cruz,

y envió a ese niño, que entre rimas

le hace diademas a una espina. 

Nunca me atreví 

a sentirme un lirio de río,

pero en sus ojos, 

anhelo carmesí,

soy el cisne negro disociado,

entre la realidad 

y la letanía 

de ser la mitad 

de una nueva vida.

Líneas van y versos vienen.

Hay camas que se abrigan,

y lunas llenas que se abstienen.

El amor profesado, late, se siente,

se vive, se consiente,

y se transcribe,

más allá de la muerte.

 

Ángel mortal,

tu aliento es vida eterna, 

para estas pupilas latinas

embebidas en tu retina. 

Mi piedra filosofal, 

el néctar de tu suave trova, 

capaz de transmutar,

paraísos perdidos en la alcoba.

Silvia Robles

 

 

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Comentarios +

Comentarios2

  • Llaneza

    Que bonitos versos.

  • Lualpri

    Hermoso!

    Gracias 🌺



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