¿Te acordás de cuantas palabras mencionaste aquella noche?
¿Cuantas tazas de café te acepte con tal de no marcharme?
el anhelo de permanecer, siquiera conversando, o
el bostezo de una luna sugiriendo que me escapara.
Campesina, pelo largo, olorosa a pan horneado, y
a café, tan negro como el pecado de amarte tanto, o
tan mía y tan de nadie, tan sola aunque conmigo, mi música
al oído, provocada, y con tan solo aquella mirada.
Una manta fue testigo de lo que no debió pasar,
o quizá suceder en otro tiempo, y en otro lugar,
con el valor suficiente de llevar, o solo dejar,
Las consecuencias de aquellos entonces, ¿las recordás? o
¿ya la niebla de la indiferencia las consumió por vos?
No sorprendería, que solo uno conserve la memoria.
A fin de cuentas, Solo es uno quien tiene que recordar.
- Autor: Phocas1 ( Offline)
- Publicado: 8 de mayo de 2023 a las 22:08
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 5
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