MiSmOs LaBiOs (Poema 328)

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328. MiSmOs LaBiOs (Poema 328)

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Mismos labios... esos labios tiernos y carnosos...

quizá mucho más, mucho más sabrosos...

que la fruta fragante como fresas vibrantes con frambuesas

coronan triunfantes... una boca sensual... en un beso que apasiona.

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Mismos labios... ofrecen de los truenos, los verbos y canciones

de una cadena de besos... que jugosos, asaltan la locura

en pleno vuelo... de ansias y palomas que plácidamente

con el viento, llegan suntuosas al confín del universo.

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Mismos labios... esos labios que a veces maliciosos...

se fruncen entreabiertos, en un tierno beso…

que inocente... a punto de estallar

causan deleite... en un cuerpo que abarca un continente.

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Mismos labios... esos labios pálidos y tiernos se asemejan a pétalos celestes... 

en un caminar espléndido de luna... en un bagaje lento que perpetuo

en tronar de montañas... solo abarcan con suavidad de eco 

un par de enhiestos y turgentes... brotes de rosa en sendos picos.

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Mismos labios… que a veces llegan finos... temblorosos...

como el rio que fluye serpenteante

que embruja mitos y canciones, concurren en titilar presente...

con estrellas... cambiantes y conscientes... llegan lentamente y prepotentes...

al vivo bajo vientre, que albergara las crías en otrora

y hoy se ofrece paciente como la diosa Venus consecuente...

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Mismos labios... ¡ah! esos labios que otras veces concurren pecadores...

y prodigan besos hechiceros

que explosivos... se esconden en la rosa locuaz de los volcanes...

volcanes de carne... que amamantara la vida, y ahora... son como rosas...

con el sangriento embrujo loco y arreboles... 

al beber el néctar de la copa... en un duelo, que de dioses

ofrece el elíxir de creadores... corazones revueltos que palpitan

y se embriaga la piel, la piel de labios que carnosos 

albergaron del verbo la luz y con canciones... de cuna,

canciones que abarcan todo... todo un continente...

con sus enhiestos y turgentes brotes...

en duelo de dioses... que en otrora fue...

ahora... se beben del embrujo, el conjuro de amor,

de lucha y la fiereza de unos labios suntuosos...

que aún expresan rubor, amor, alevosía y calma, en el encuentro que culmina...

en día... al recorrer lentamente el continente... que se ofrece yerto en un lecho

de soles, estrellas, cielo y rio, para un par de labios que han vivido...

han vivido... la historia de una vida y emanan cariño, paz y alegría

de una vida larga... larga y bien vivida.

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R.D.A Esther J. Londoño Arbeláez -esthelarez- de Colombia

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