Sólo bajo el ocaso de un nuevo dia

Nitsuga Amano

Bajo la mirada efímera del atardecer, donde vuelvo a ser testigo de la calidez que brinda la caricia de la brisa que se desvanece, exploro la anatomía del momento, experimentando con cada evento y disfrutando de este sentimiento de tristeza. 

 

 

Cada día que pasa es un punto y aparte hasta las doce de la noche y el amanecer marca un nuevo comienzo y la historia sigue su camino sin más. 

 

 

Un suspiro que se escapa entre sonrisas. Los recuerdos caen como gotas sobre un cojín, las lavadoras del tiempo giran sin fin. 

 

 

Me cobijo bajo un paraguas de añoranza, mientras gotea la lluvia de la nostalgia. Hay días que se viven en círculos, donde los sueños bailan sin cesar, donde se desvanece el eco de un susurro. 

 

 

A cada paso encuentro tu nombre, grabado en los moldes del olvido y los grises del pasado enmarcados en mi piel. El reloj impasible marca los pasos del tiempo al ritmo mismo del unísono de cada latido.

 

 

 Los años siguen su curso y no esperamos a que nadie se quede atrás, el conductor no tiene paciencia, somos más como pasajeros de nuestra propia vida.

 

 

 Algunos vienen a reflexionar sobre la fugacidad de la existencia, y cómo nos sentimos atrapados en un laberinto lleno de pros y contras tratando de sobrevivir el mes y otra deuda que pagar la próxima vez. 

 

 

A cada paso, el pasado se desvanece y el futuro se desdibuja como un horizonte incierto. Nos aferramos a esos instantes que son más que un tesoro, aunque sean unos segundos, mientras el minutero sigue con su constante tic-tac. 

 

 

En el vaivén de las estaciones y de los años, contemplamos la grandeza del universo en movimiento. Somos testigos de la eterna danza del tiempo, mientras buscamos nuestro propósito en el engranaje cósmico. 

 

 

En medio de los círculos que dibujamos, descubrimos la esencia misma de la existencia. Somos viajeros en un universo en constante expansión, marcados por el fluir del tiempo y las huellas de nuestros pasos reflejadas en las arenas del tiempo. 

 

 

Así, bajo la mirada efímera del ocaso, nos sumergimos en la infinitud del tiempo, buscando la eternidad en momentos fugaces, y encontrando en cada recuerdo el eco de nuestra propia historia.

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Comentarios +

Comentarios2

  • Omaris Redman

    Hermosas letras reflexivas!

  • MISHA lg

    Así es poeta solo somos viajeros
    gracias por tus letras reflexivas
    En el vaivén de las estaciones y de los años, contemplamos la grandeza del universo en movimiento. Somos testigos de la eterna danza del tiempo, mientras buscamos nuestro propósito en el engranaje cósmico.


    besos besos
    MISHA
    lg



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