EL DILEMA---

Carlos Eduardo


AVISO DE AUSENCIA DE Carlos Eduardo
Hola - Chauuu


Una entrevista real:

-Periodista: ¿Es usted feliz?

-Escritor:      ¿Por quién me ha tomado usted?

 

Continuaste,

por ejemplo,

podría verme afectada

por virus, bacterias, bacilos, picaduras, ...

para que decir con los papeles de identificación

y de todo tipo, ...

...

comenzarían los problemas

económicos, culturales, morales, ...

transmitiría

mi propia flora microbiana

para la que no están preparados,

intentarían

llevarme de retorno

los de mi especie, ...

...

Quedé abrumado por unos instantes,

luego reflexioné,

quizás,

has omitido lo más importante,

qué sería de nuestra amistad,

podrías acostumbrarte,

cómo sería la vida en común

si es que me aceptas como amante,

en realidad,

ignoro todo de ti,

de dónde eres e infinitamente más;

 

no obstante,

¡me trastornas!

...

========

REFERENCIA:

LA MAJA DESNUDA
Leía a Maquiavelo en la terraza, la temperatura subía, apareciste esplendorosa en el césped de al lado, tendiste una toalla clara de múltiples colores, no quise evitar mirarte, mientras pausadamente te sacabas el vestido posándote a tomar baños de sol, voluptuosa, hecha a mano, me distraje largamente en tu belleza; desperté de esa hipnosis, retomé "De Principatibus", los párrafos, llevaban a inferir la frase escrita por Napoleón "el fin justifica los medios". 
Ese largo verano se me hizo breve, ya sabía de memoria tu cuerpo de odalisca dorada.
Una noche llegaste a mi casa, reías cristalinamente, amorosamente, conversamos de mil cosas; no nos preguntamos los nombres, pero era seguro que tú sabías dónde estaba yo con mis libros en los momentos de tu desnudez; me contaste que diariamente caminabas por la playa, que también deseabas sentir los rayos en la terraza.
En la mañana temprano me senté en un banco de madera en la costanera, ahí en la arena se divisaban tus cosas, pronto divisé tus contornos acercándose, te vestiste y volvimos charlando alegremente; subimos a la terraza, advirtiéndome, puedes mirar, pero no tocar, sonreí retirándome, diciendo quedamente, qué martirio, qué tortura, agregué hoy termina el verano, desde mañana voy a estudiar, alejándome escuche: yo también.
Al despedirnos, le dije me llamo tal...

LA MAJA VESTIDA
Transcurrieron 2 años desde cuando nos despedimos; mi casa estaba cerrada, quería olvidarla; no obstante, ese día iba de una librería a otra, de repente en la calle me llaman, ¡eras tú!, corro a abrazarte, mis manos quedan vacías; pienso, ¡estoy alucinando!; vuelvo a casa, abro cortinas y ventanas, me recojo en el sofá; pasarían, minutos, horas, no sé, suena la campana en el zaguán, me asomo, ahí estabas, haces un gesto y yo otro para que entres, me miras y rompes en risas, yo en cambio digo, ¡estoy delirando!, ella dice, ¡no!; te voy a contar, estoy de visita en este mundo, inmunizada al roce de los seres vivos, una suerte de holograma o realidad virtual para ti, si me materializara en un 100 %, paso a ser una más entre ustedes, con desventajas letales, ...

========

Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos


Comentarios +

Comentarios1

  • María C.

    Ahí está el dilema.
    Un abrazo

    • Carlos Eduardo

      Otro para ti
      🌹🌹🌹

      • María C.

        MERCI 🙂



      Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.