Este daño que inflige el desapego
de tus ojos, tus manos y tu boca,
daño que tu frialdad mi mal provoca
mientras ardo en la llama de mi fuego.
Revés feroz que asestas con tu juego
de niño caprichoso, que me aloca
y a la aflicción sombría me convoca,
el nefasto engreimiento de tu ego.
Cuando en mis ansias ruge la locura
acometes igual que una tormenta
y de mi amor y mi lealtad te mofas.
Y buscando elixir para mi cura
te escribo sin apenas darme cuenta
el repudio a tu daño en cuatro estrofas.
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Autor:
Rosario Bersabé (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 20 de junio de 2023 a las 01:05
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 15
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez, Lualpri, Andrea🌙, Mauro Enrique Lopez Z., Lucía Gómez, Carlos Eduardo
Offline)
Comentarios3
Cuando en mis ansias ruge la locura
acometes igual que una tormenta
y de mi amor y mi lealtad te mofas.
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Que INTENSIDAD de bellos de preciosos versos.
saludos poeta
Muchas gracias, Alicia.
Rosario grato es pasar por tus letras poética saludo abrazo fraterno bendiciones desde Ecuador
Muchísimas gracias, Mauro.
Hay miradas y gestos que dañan.
Muy sentido el soneto.
Hola Rosario tienes un apellido muy catalán aunque eres sevillana, pero me ha llamado la ateciñon
Un saludo
Gracias, María.
EN realidad Bersabé es un apellido hebreo, que tiene su historia. Quiere decir, El pozo de los siete deseos. O el pozo de los siete.
Ostras que hermoso, merci por explicarlo.
Un abrazo
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