Hijos, les doy por herencia mi nobleza,
mi sencillez en la escasez y la riqueza,
mi valor para enfrentar la artera vida,
mi tolerancia por ustedes conocida.
Les heredo el amor envuelto en alicantos
y aunque el amor es bueno, habrá también llantos,
más su entereza es grande y tendrán diplomas
con coplas de rosas y fragante aroma.
Les heredo el placer de la felicidad,
esa que vivimos en complicidad,
¿recuerdan? mejor que recibir, es dar,
mejor es amar con hechos, que rezar.
Por último, les heredo sin más mi paz,
esa que me arrulló en mis álgidos días,
esa paz que protegió mi último viaje
y me hartó de amor con su fino linaje.
Hoy dejo por legado mi poesía,
no es su herencia, pues es parte de mi vida,
espero que su sino no sea el mío,
pues mi sino no es igual a su camino.
Andrés Romo
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- Autor: Andrés Romo (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 7 de julio de 2023 a las 22:39
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 10
- Usuarios favoritos de este poema: Dante Cruz Velez, alicia perez hernandez, Henry Alejandro Morales
Comentarios2
Hoy dejo por legado mi poesía,
no es su herencia, pues es parte de mi vida,
espero que su sino no sea el mío,
pues mi sino no es igual a su camino.
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Hermoso legado y hermosa carta para tus hijos, yo creo que la mejor herencia es el amor.
Abrazos y saludos mi poeta Romo
Gracias querida Alicia por tu comentario a mi publicación, como siempre, te envío un beso y un cálido abrazo poetisa mía.
¡Qué bello poema, Andrés! conmueve el alma, porque lo mejor que les podemos dejar a nuestros hijos es nuestro buen ejemplo de sencillez, de honestidad, de misericordia para con el prójimo, de amor para ellos mismos, de enseñanzas cristianas, yo por mi parte también les dejaré mi poesía, espero que la valoren siempre. Un cordial saludo.
Gracias Ingrid por tu comentario a mi publicación, saludos fraternales.
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