Letrosos

José Luis Galarza

 

Los leprosos de hoy somos incógnitas

entre las cosas más cercanas, digo cosas

y no hombres, invisibles entre las cosas

porque se arrancan los ojos los saludables.

 

Es que los saludables ven por todos,

sólo caminos limpios de sus diarios

enseñan la dureza de la piel, los callos,

la membrana de los ojos, impostergable

el mundo que puede violado por la luz.

 

Los leprosos en cambio perdemos colgajos:

lamentos silenciosos, grillos, astillas,

monedas, monólogos, interrupciones,

heridas y pozos con silencios rotundos,

temblores, fiebre y desmesura.

 

Caminamos a los calabozos de irrealidad.

arrastrando piedras y manicomios,

con la policía y el insomnio a cuestas

ostentamos nuestra consternación.

 

©JoséLuisGalarza

 

***

(Sonetillo de Freddy)

Los sanos insanos
que ven los leprosos
son como gusanos
que comen sus lodos.

habiendo manzanos,
habiendo de todo,
inviernos, veranos,
que traen sus soplos.

Mirar sin mirar
decir sin sentir
que el verbo es amar

amar sin mentir
lo que hoy has de dar
por un buen vivir.

***

 

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Comentarios +

Comentarios5

  • Kapirutxo

    Hábil, profunda y poética composición es esta.
    comparando la lepra con la letra.
    Me gusta.
    Un saludo


    • José Luis Galarza

      Muy agradecido estimado Kapirutzo, exacto, ese es el paralelo y el título vino después, como un juego. Saludos.

    • Lale Neda

      Muchos leprosos hoy en día que se pierden en su consternación...excelentes versos....Saludos Cordiales

      • José Luis Galarza

        Gracias poetisa, me alegra que gustado. Saludos cordiales.

      • Freddy Kalvo

        Los sanos insanos
        que ven los leprosos
        son como gusanos
        que comen sus lodos.

        habiendo manzanos,
        habiendo de todo,
        inviernos, veranos,
        que traen sus soplos.

        Mirar sin mirar
        decir sin sentir
        que el verbo es amar

        amar sin mentir
        lo que hoy has de dar
        por un buen vivir.

        Espero no haberme ido por la tangente en mi apreciación estimado José Luis, pero mi sonetillo expresa lo que asimilé de tus profundas letras.

        Un abrazo fraterno mi hermano.

        • José Luis Galarza

          Estupendo sonetillo, perfectamente acorde con lo dicho, hermano. Si me permites lo agrego como apéndice o complemento poético del mío. Un abrazo fraterno.

          • Freddy Kalvo

            ¡En serio, fue acertado? ¡Qué bien, me alegro! Y hazlo, agrégalo si gustas. Lo escribí para reforzar tu sentir y pensar. Muy agradecido mi hermano.

            Un abrazo fraterno.

            • José Luis Galarza

              Hecho!!!, un abrazo.

            • yunque

              Buenísimo poeta , ya sabes todo lo que sea diferente al rebaño es peligroso e infeccioso , originalidad a raudales la tuya
              Saludos

              • José Luis Galarza

                Muy agradecido por tus amables palabras poeta. Reciba mi afectuoso saludo.

              • alicia perez hernandez

                vamos por la vida como leprosos pero ni cuenta nos damos, cada girón podríamos alimentar a otro leproso, pero mientras no veamos la cura en nosotros no vamos a ver que el otro necesita estar tan bien como nosotros.... cuando pasas por un centro comercial ya huela mal de tantos leprosos que andamos allí. nos hace falta caridad.
                abrazos y saludos José Luis

                • José Luis Galarza

                  Querida Alicia, agradezco tus palabras reflexivas, hay mucho para pensar con respecto a los centros comerciales. En este caso hablo de aquellos que no encuentran lógica y sentido a estas formas de vida que sobrevaloran lo material o que exilian a los que piensan diferente, creo que lo que más se está vendiendo, con lo que más nos estamos vistiendo, es con vacío, con incomunicación. Hay un adelgazamiento del pensamiento, de allí la imposición de estructuras de poder homogeneizadoras. Es una sociedad que odia la diferencia. Hay que amar la diversidad, que es la regla más valiosa dada en la vida natural. Hace falta empatía, conexión real, comunicación real, y amor a lo diverso (no amor posesivo). Abrazos.



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