¿Por dónde empezar?, me pregunto.
Mis manos se entumecen al intentar escribir,
como si un monstruo devorara mi alma,
como si un ser oscuro me despojara de toda felicidad.
Quizá me atribuyo demasiado, y es que tener un día,
al cual poder llamar mío...es abrumador.
Quisiera no tener miedo al despertar en mi onomástico,
cuando enfrento mi existencia.
No tengo nada extraordinario que ofrecer,
ni un Alcázar donde ocultarme,
pero tal vez pueda hallar refugio en los lagos apolíneos de Velásquez,
donde la serenidad reina,
y se observa la inquietante contradicción en los ojos serenos de sus musas.
¿Qué es un onomástico?
¿El recordatorio del envejecimiento de nuestras células?
¿Nuestra innegable existencia?
O tal vez se refiera al hecho de que puedo morir mañana.
Sinceramente me aturde escribir
sobre algo en lo que ni siquiera puedo pensar,
solo quisiera entregarme todos los días a vivir, a mí misma.
Tal vez es un recordatorio
de que te debes entregar a los demás una vez más.
Mis manos tiemblan, no por frío,
mis ojos lloran, no por tristeza,
es el mal inherente a los seres humanos,
una carga que llevamos desde nuestro primer aliento,
y que solo se disipa con nuestra última bocanada de aire.
El genio no existe sin evidencia tangible,
nuestras ideas solo cobran vida cuando se materializan.
Estas palabras incólumes se hacen patentes a vuestros ojos,
pero antes de ello, ¿qué son?
Un potencial latente,
esperando a ser descubierto.
Mis palabras pueden no germinar,
eso lo sé muy bien,
pero mi potencial existe
como un halago que se hace a los demás.
Y en el mundo de las ideas, todo comienza con un pensamiento.
Comentarios2
Bueno poeta, me he paseado por una nueva versión de Descarte.El pienso luego existo, que da reemplazado por "hago y soy". Y has dicho una verdad absoluta, la creación procede del pensamiento y su existencia dematerializar el pensamiento.No obstante, la racionalidad se ve invadida por un deseo de ser y hacer sin razón.Nihilismo de Nietzsche, toma cuerpo en algunas expresiones vitales.Malo, bueno NO. Hay un ser propio que debe buscar el equilibrio que le
permita ser lo que su naturaleza le indica, lo que quiere y puede ser, sin cadenas y ni condenas.
Me encató tu trabajo y su desenlace filosófico y vital.Gracias.
letras para meditar el paso por esta vida poetisa
gracias por compartir
Pero, ¿Qué es un onomástico? ¿El recordatorio del envejecimiento de nuestras células?
¿Nuestra innegable existencia? O tal vez se refiera al hecho de que puedo morir mañana.
besos besos
MISHA
lg
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.