Casida del amor perdido.
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No quiero de ti más que solo amor,
amor mío, tu olor virgen de rosa
ciñe mi corazón con su calor, *
no quiero de tu prímula otra cosa.
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No es pecado este anhelo de vivir,
ni el dulce olor del ámbar de tus labios;
mi corazón no para de latir
entre flores e insípidos resabios.
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Lástima, que marchaste de mi ser,
que el invierno cubrió nuestra pradera.
Bien recuerdo que al ver tu amanecer
mi ilusión se mostraba algo sincera.
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Esta elegía mengua cual la luna
en la franja del éter que la cubre,
yo perdí tu perfume y mi fortuna
bajo una lluvia pálida de octubre;
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lluvia de perla, oro y mar azul.
Te consagre un amor puro y sin mácula,
más allá de este cielo envuelto en tul
brillará nuestro idilio en una fácula.
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No quiero presa el alma tras las horas
donde un violín entona su sonata
y se ven sin preludio las auroras
llevándose el ardor de la fogata.
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*aliteración.
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Azul de cianuro.
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Autor:
Azul de cianuro. (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 10 de agosto de 2023 a las 21:04
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 11
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez
Offline)
Comentarios1
Bellísimo, me ha encantado leerlo.
Abrazos.
Saludos, mil gracias por la lectura.
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