Y el méndigo por un amor, quedó olvidado mientras que la mujer que lo busca mueve cielo y tierra y sobre el mar también en la búsqueda del alto ejecutivo por el área aledaña por hallarlo y con vida. Mientras que el méndigo pierde razón y más que eso la vida a cuestas de un amor que no le correspondió en amores pasionales, y de vehemente acción en libidinoso amor. Cuando ocurre el trance imperfecto de creer en el alma muerta de un sólo espanto cuando ocurre que su ser lo pierde entre el alcohol y la vida que lleva. Cuando ocurre el desastre de creer en el alma una sola verdad cuando se da la magia indecorosa de dar una sola señal de invertir tiempo y energías en la búsqueda de éste alto empresario que da su vida como méndigo por un amor mendigando amor, pan y limosna y todo por un sólo amor que no le amó como él esperó y que se casó con otro hombre en el altar. La mujer que amó no era feliz del todo si nunca encontró ni una señal de amor por parte del ejecutivo ni sabe de tal forma que él la amó con todo su amor. Si la mujer que está a punto de hallar al hombre sólo se dedicó en fuerza y dolor de encontrar el sólo rencor y la sola lluvia deseando abrir el cielo y más en el ocaso frío de todo un sol en el desierto frío en querer amarrar el recelo de la vida. Cuando en el albergue de todo y de toda vez se fue de rumbo incierto una noche abatido por el dolor y por el mal amor de ésta mujer que se casaba con otro hombre. Y después de todo se fue a albergar a su corazón entre ser un méndigo por un amor y el alcohol fuerte. Su olor nauseabundo a suciedad y a soledad en lo insalubre se dedicó en ser como el mismo dolor a consecuencias frías en que se dedicó lo más tenebroso de un todo, ir lejos en ese callejón porque sólo entregarse al alcohol desnudado su tiempo y más sus celos de hombre travieso. Cuando en el desenlace frío se convierte como todo méndigo por un amor que dentro del ocaso frío se siente como se percibe una idea de entregar alma y corazón y en contra de un porqué quedó abatido, adolorido y mal inconsecuente mirando y observando lo que quedó como el siniestro cálido de entrever el aire sosegado de dar una sola insistencia. Y entregar sólo el recelo de la vida, quedó como el dolor más doloroso de creer en el trance perfecto de ver al cielo de flavo color de un sólo ocaso y de un frío atardecer con nieve en el suelo. Si en el destino frío de éste hombre méndigo por un amor quedó por siempre como un méndigo de la vida, desde el comienzo y hasta el final. La mujer que lo busca, no lo halla jamás dejando a toda fortuna y a toda riqueza de una empresa que va a la cúspide y todo gracias a ella, a la mujer que él ama con todo su corazón y sin saber ella, que él la amó con toda su alma. Y queriendo formalizar la relación fue un día a su hogar, pero, él la vio con otro hombre, con el cual, se enamoró y se casó. Si en el trance de la verdad lo buscan tanto que nadie imaginó que podía ser un méndigo apestoso, con suciedades y con una salud insalubre, por el cual, con polvo en la cara y resequedad en el rostro, nadie lo reconoce, y con una barba larga y nos ojos de color rojo por tantas resacas que tomó con alcohol. Y la vida de éste méndigo por un amor quedó a la deriva, al mar perdido y al frío vestido de más fríos. Porque cuando en el alma de éste hombre quedó abatido y malherido y sintiendo el desenlace frío de creer en el amor a toda costa se dedicó a ser como todo méndigo por un amor, evadiendo responsabilidad y virtud, y vicisitudes frías de la vida. Si en el trance de la verdad quedó como el delirio delirante de creer en el combate si en la vida quedó como un malherido méndigo por un amor que quedó con todo amor, pero, en su corazón. Observando al siniestro cálido de entrever el desastre entre lo acometido y lo fantasioso de la vida, pero, en realidad. Cuando en el desastre de creer en el alma sin ímpetu de proseguir un sólo camino quedó toda su vida en un deterioro de vida siendo un méndigo por un amor que nunca vuelve al principio de su existencia. Si en el deseo y el mal incurable de creer en el opaco imperfecto de luz en el cielo en esa noche impetuosa camino callejón abajo y nota que un automóvil se acerca al méndigo por un amor y la observa a ella por el cristal del automóvil dejando caer una lágrima de dolor cuando ocurrió el mal percance de creer que la mujer que amó y que, por la cual, se halla de forma y manera como un méndigo por un amor, quedó por siempre grabado en su mente y más en su corazón cuando sólo la observó y sin hacer nada quedó como todo méndigo por un amor en el mismo callejón abajo que camina todos los días buscando con qué comer y también beber. Cuando en el trance del temor y un intransigente dolor a consecuencia del mismo amor que él tenía en su insistencia autónoma de dar con la fría verdad. Cuando al afán de ver su rostro abatido entre el cristal del automóvil lo recordó todo desde que ésa mujer lo ayudó a creer en él, a edificar su empresa y a querer al amor aunque sea por un amor no correspondido aunque él nunca lo entendió y recordó también que nunca le dijo que la amaba con todo su corazón, cuando en el trance de la verdad quedó todo como un vil yerro automatizando la espera inesperada de dar con la sola verdad. Y ese mismo día en la tarde fría de nieve se armó de un valor intransigente el méndigo por un amor, y llegó hasta su empresa y fue otro hombre, el cual, siempre recordará que fue sólo un méndigo por un amor que amó con todo el corazón…
FIN
Por: Srta. Zoraya M. Rodríguez
EMYZAG
- Autor: EMYZAG (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 16 de agosto de 2023 a las 00:04
- Comentario del autor sobre el poema: ~ * ~Sinopsis: ~ * ~Un hombre rico mendigó a un amor, y quedó como un vagabundo cuando ella se casó con otro…sin pelear su amor… Mi #19 de novela corta en el año 2023… Mi #137 de novelas cortas hasta el año 2023…
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 7
- Usuarios favoritos de este poema: Andrea🌙, Pilar Luna
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