Aclaro, no soy poeta pues no estoy muerto.
No soy poeta, solo finjo
como niño jugando a ser carpintero
hago, digo lo que pienso
y no interesa si es soneto.
Aclaro, ante la derramante crítica me halago,
si en tu lengua está mi nombre
!Vaya que de mí se ha hablado¡
Solo juego, tomando la pluma
injertando en mi un poeta ,
donde, a primeras, el plagio se transforma
y retuerce hasta ser propio.
Juego a ser cursivo en mi letra,
y sin saber reglas me adentro en el tablero,
días intento ser barroco
y otros, por su rostro
simplemente son romance.
En mi no hay titulo de poeta,
sería burla en vida
más recuerdo y cita en la muerte.
Ya, a lo malo o a lo bueno
se me ha aconsejado:
“ Si deseas ser poeta, solo escribe poco
pues los grandes mueren pobres
y las riquezas , si es que llegan,
solo se heredan a los próximos infantes”
Reafirmó, esta claro, no soy ni sombra del verso,
no soy ni ombligo de la hoja en que escribo.
Solo soy un loco que leyó
y ahora imita a un tal Vallejo.
-
Autor:
Luis Otero (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 11 de octubre de 2023 a las 11:23
- Comentario del autor sobre el poema: Últimamente he estado leyendo a César Vallejo, inconscientemente me he dado cuenta que en cierto punto trato de imitarlo, aunque diría más que me solo me inspiró en la forma de sus poemas
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 26
Offline)
Comentarios5
Primero fingimos, luego, uno o dos se confunden... Decenas nos creen,
Y ellos, por y con presión, nos ariborran diciendo que sí somos...
Nosotros asentimos en silencio y fingimos seguir la corriente..
Muy bueno, alguien en una ocasión me dijo, "La poesía no da de comer" por eso yo la uso de terapia hoy en día, lo cual es muy placentero. Saludos!
Cuando gusta hay que decirlo y a mi me ha gustado, con esos tintes que dices, pero sobre todo por las ganas y buen hacer del poeta que lo escribe.
Un saludo y fuerte abrazo
Excelente Luis...hay tanto poeta en este mundo que es imposible no parecerse unos con otros
A veces somos poseídos por palabras de otros, nunca fingimos del todo salvó cuando dejamos de sentir lo que escribimos y aún así seguimos escribiendo. Después de todo che, la vida es un plagio.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.