Eres...

Más indiferente que de costumbre,

con la soledad envolviendo mi sombra…

y el silencio sitiando este abandono que siento.

Delirando,

con la mirada extraviada en el abismo de lo imposible,

tratando de encontrar una inalcanzable respuesta.

Meditándole a un futuro incierto,

intentando no caer en esa melancolía sin salida,

haciendo el último esfuerzo por salir de la tristeza.

Me transporto en la idea de retroceder el tiempo,

de corregir errores…y esquivar los desaciertos,

hasta he pensado en hacerme un juramento…

obligándome inútilmente… a olvidarte para siempre.

Divago en la nostalgia…y te encuentro,

quiero pensar que estuviste ahí…aguardando,

quiero imaginar que te hiciste real…por un momento…

y que toda mi pesadilla…termino con tu regreso.

Pero eres como un espejismo…que se desvanece en el intento,

como oasis de agua clara…que enloquece mi sed de tenerte …

pero se evapora repentinamente… de mi ficticio desierto,

eres como la lluvia que refresca mis instantes de angustia…

pero que desaparece apenas escampa,

te convertiste en la más larga noche de desesperanza…

donde la luna ahora prefiere aferrarse a su ausencia.

Eres mi insomnio permanente,

un desvelo que me atrapa en su descolorido desgobierno.

Te has convertido en la más atroz añoranza….

que está a punto de trastornar mi apagada esperanza.

Desvariando como de costumbre…ahora despierto,

clavada la mirada en lo improbable…

cierro otra vez los ojos…

y lastimosamente debo conformarme… con tu realidad ausente.

Eres mi fugitiva alucinación…que robó mi corazón…

y me dejó en suspenso…aquí todavía esperando.