La pulga del poeta

Una pulga se hospedó,

en la cama del poeta,

sin permiso dio dos brincos,

es gruñona y rencorosa,

sueña en detener la pluma,

más sus fuerzas son de pulga, 

indefensa y muy horrible,

se maquilla y va al acecho,

en su mundo miniatura,

se escabulle por recodos,

en los sueños va saltando,

de una pata en su delirio,

el poeta ni la mira,

por enana y agrandada,

microscópica tormenta,

pues la pulga es solo pulga,

esos versos su flagelo,

si la miran se sonroja,

si la tocan se derrite,

si la soplan se disipa,

por el aire y su miseria,

una pulga es solo pulga,

criatura del subsuelo, 

el poeta ya lo sabe,

cualquier verso vale más, 

que una pulga muy enferma, 

y con cancer terminal.

titánico.

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