Rugió como león
mi corazón dormido,
al ver tus ojos tristes
mirarme en silencio.
El día lo negaba todo
menos tu leve sonrisa,
cuando toque tus manos
suaves, nerviosas y tibias.
Perfumaste el aire libre
que reposa en el azul celeste
y merodearon en mi mente
de tu alma todas tus voces,
eran sensibles, vivas y amorosas
en la brisa calmada que oteó tu belleza.
Y ocurrió el pequeño milagro
de estar a solas contigo
en tu minúsculo mundo,
en el que creciste con tus ojos tristes
y con tus mudas palabras.
Cayó la noche fresca y serena,
tiemblan mis manos tímidas
en la soledad de tu cuerpo,
callando mi voz con tus besos.
Volcado en tu piel de pétalos,
escuche la llovizna del tiempo,
que trajo de tu vientre mariposas,
bajo la mirada hermosa
de tus ojos tristes y negros.
- Autor: Nan (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 4 de diciembre de 2023 a las 16:04
- Categoría: Amor
- Lecturas: 12
- Usuarios favoritos de este poema: Lualpri, -Martina-, alicia perez hernandez
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