... encierra, enclaustra y acostumbra la tristeza, el puro sufrimiento,
pues viene y llama la alegría y la estoy recibiendo con la frente temblando,
como si de pronto el cuerpo extrañara y una inercia ominosa
hubiese obviado para siempre la imprevista irrupción de sucesos hermosos;
... es, así, que la alegría casi duele al apretarse a la piel del pecho para hacerse sentir,
para ser reconocida y asumida, y, de esta forma, abrir, inhalar su canto y poder pronunciarse;
... y son, son tan pocas las gotas de rocío vivo
que van apareciendo y florecen en el ardinal en que a veces soy y somos,
que, en este instante, las cojo y pongo por las grietas del ser cuidadosamente,
no para que crezcan, no, sino para que no mueran;
… con asombro miro en mí,
y todo parece revertir a este breve instante en que me quedo quieto,
muy quieto y escuchando,
como si el leve fulgor que está llegando, estuviese en peligro, y, con rapidez,
contra un mar taimado de oscuridad infinita,
tuviera que ordenar mis fuerzas para creer que llegaba a mí, y, enseguida,
- frente a un terror o espanto, tronando por la sangre -
amarlo hasta el suplicio y defenderlo.
***
Antonio Justel/Orion de Panthoseas
https://www.oriondepanthoseas.com
- Autor: Orión de Panthoseas (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 18 de diciembre de 2023 a las 17:45
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 4
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez
Comentarios1
ITERESANTE TU ESCRITO
... Alicia, gracias, colega por tu linda visita, te lo agradezco de corazón, cómo no ... Abrazo, amiga, y felices días navideños... Venga ... a. justel/Orión
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.