Novela Corta: Manos Atadas
Por: Srta. Zoraya M. Rodríguez
Seudónimo: EMYZAG
Comenzada: 28 - 31 de diciembre de 2023…
Publicada: 31 de diciembre de 2023…
Terminada: 31 de diciembre de 2023…
Editada: 31 de diciembre de 2023…
Mi #37 de novela corta del año 2023…
Mi #155 de novelas cortas hasta el año 2023…
7083 Palabras 10 Páginas
~ * ~Sinopsis:
~ * ~El secuestro inesperado de la perrita Lili tiene un valor de 1 millón de dólares… es una gran y terrible persecución en la búsqueda de ésta perrita...
Lili es la perrita de Andrea. Lili es de raza ¨poodle¨. Lili llega a la vida de Andrea, después de un altercado friolero entre los padres de Andrea. Lili logra imponer paz en el hogar de Andrea después de una fuerte discusión entre los padres de Andrea. Lili es una ¨poodle¨ de raza muy valiosa y cree en la vida como en el amor que le ofrece Andrea. Andrea es una jovencita de cabellos rubios y con ojos de color azul. Andrea quiere mucho a esa perrita llamada Lili. Y Lili también quiere a Andrea. Si Andrea sólo lleva de la mano a Lili, con una cadena que amarra la vida de Lili a los manos atadas de Andrea. Las manos atadas de Andrea quedan adheridas a la vida de Lili, con una cadena que lleva a la perrita, a su vida de tal forma y de tal manera que la tiene con manos atadas, amarrada a sus manos por cariño y amor hacia una perrita llamada Lili de raza ¨poodle¨. Andrea es la única dueña de la perrita, pero, la vida de Lili es una vida de riquezas, de joyas y llena de una buena apariencia de elegancia y distinción como es la belleza de la perrita Lili. La vida de Lili es una vida perruna, elegante, distinguida, con porte y siendo de raza ¨poodle¨ es la más hermosa de todas las perritas del barrio. Lili es la cosa más hermosa de todas las perritas y es la envidia en distinción y elegancia. Lili es la más elegante de la alta sociedad siendo la perrita más valiosa tanto sentimental como valor monetario para Andrea. Andrea, la jovencita que sus padres tuvieron un altercado y que le regalan esa ¨poodle¨ como regalo para que olvide la fría contienda entre sus padres, es tan bella como la perrita Lili. Lili es la alegría de todos cuando se supone que la vida es tal como es. Lili es autónoma en hacer sus necesidades fisiológicas correctamente, sin riesgos ni daño alguno en la mansión donde vive. Lili se torna desesperada cada vez que ve a un perrito alrededor de la mansión. Lili es la perrita más linda de todos los tiempos, cuando en el afán de dar una patada la da sin más ni más. Y Lili en el corredor de la mansión se siente como una ¨poodle¨ sata, pero, no no era sata sino una ¨poodle¨ y de todas las razas más valiosas. La vida de Lili, se vio intransigente cuando sus ladridos despiertan a cualquiera en la siesta. Andrea y su alma se vio indeleble como las huellas de las patitas de Lili, cuando en el lodo está y corre por toda la mansión y dejando la huella de sus patitas. Cuando en el trance perfecto de la vida y más de la vida de Lili, se vio alegre y con felicidad de perrita con dueña y amo se vio abatida, sin herir a sus patas perrunas de dolor y con un lodo, el cual, le encanta en su lana peludita en todo su cuerpecito. Cuando en el dolor del alma de Andrea por la trifulca de sus padres y con el dolor en su pecho, vio que el regalo que le ofrecen es una perrita ¨poodle¨, la cual, llama como Lili. Y Lili se enternece con el cariño y el amor de Andrea, la jovencita hija de los padres más escandalosos del barrio y de la ciudad, es una niña inteligente, pero, muy jovial y amando con amor y cariño y alegría a la perrita ¨poodle¨ llamada Lili. Lili es la perrita ¨poodle¨ que atraviesa a la vida perruna como una huella trascendental y muy indeleble en el alma de Andrea. Y Andrea como la verdad indecorosa se torna exasperante como el dolor de un valor incontrolable cuando la perrita Lili es todo para ella. Y se torna inoperante la vida de Andrea sin la perrita Lili, y Lili como la perrita más alegre y ofreciendo felicidad a todos. La vida de Andrea se tornó exasperante y muy dichosa cuando le regalan a la perrita Lili. Y, Lili se tornó alegre y con una vida muy feliz dando y ofreciendo en la existencia amor y cariño, como su amo y dueña, la jovencita, Andrea, le ofrecía a Lili. Y sintiendo en el alma de Andrea una parca existencia, pero, muy feliz en el trance verdadero en creer vivir al lado de su perrita Lili, como la felicidad más intransigente que se pueda vivir hoy día. Andrea y su perrita Lili, forman un arcoiris de siete colores con la alegría viviente en poder creer que la existencia es la primavera o el verano en que se siente como la eterna felicidad. Y es que Andrea convida su alegría por tener a la perrita Lili a su lado. Si el alma de Andrea se siente como la inmensa felicidad, la cual, se convierte como el recelo de la alegría cuando la perrita Lili le ofrece amor, cariño y ternura. Cuando el alma de Andrea se convierte en un sólo trance perfecto como el deseo en querer amar como su dueña a la perrita Lili, como el instinto más perfecto en poder creer en el deseo en convertir la suerte de la perrita en un valor monetario cuando la perrita Lili es tan valiosa como un millón de dólares. Y Andrea con manos atadas lleva a la perrita Lili con manos atadas y con cadena de perritos hacia el mismo mundo. Cuando Andrea y Lili son la amistad más alegre y más hermosa de todos los tiempos. Cuando Andrea y Lili son el amo y perrita más fiel de todos los mundos. Y la perrita Lili y con un valor monetario que trasciende a un millón de dólares se siente como la perrita más valiosa de todos los tiempos. Y la perrita Lili con un valor de un millón de dólares vale más que la mansión de Andrea.
Y el valor de la perrita es más de un millón de dólares, cuando el hambre y la sed pueden valer más. El valor de la perrita Lili, es como un dolor de cabeza y el seguro de vida de la perrita cuesta más que el valor de la perrita Lili. La perrita Lili es un grave dolor de cabeza para Andrea, sus padres y la mansión cuando todo mundo tiene el conocimiento del valor de la perrita Lili y que asciende a un millón de dólares. El valor de la perrita es como una hoja al viento en el barrio, la ciudad, en el pueblo y en el sector donde está ubicada la residencia. Y el tiempo transcurre como el pasado en amor, cariño y ternura, entre Andrea y la perrita Lili y más como de costumbre el deseo y la vida y más el amor entre un amo, un dueño y su perrita Lili. Lili, como toda fiel perrita y de raza ¨poodle¨, no pierde el transcurso de ir y venir en cadenas y muy apretada de manos atadas de Andrea hacia la perrita Lili, y las huellas más trascendentales de un huellas perrunas sobre el suelo y con más lodo que enlodar la vida de Andrea y de todos por igual en la mansión. La vida de la perrita Lili se valora en un millón de dólares cuando es un precepto doliente el valor que carece la perrita Lili como raza ¨poodle¨. El valor de la perrita está estimado en un valor racial, sentimental, de cariño, amor, vida y ternura cuando el cuidado amerita la salvedad de ese valor estimado de un millón de dólares. El sentimiento que posee Andrea hacia la perrita ¨poodle¨ Lili es un valor sentimental bonito y de muchos años siendo el amo y la dueña de esa perrita derribando sueños, vicisitudes y dejando la vida marcar trascendentalmente por el amor, la ternura y el cariño de esa perrita llamada Lili hacia Andrea y de Andrea hacia la perrita Lili. La perrita Lili se ve formando un hogar lleno de amor, ternura, compasión y cariño cuando se torna seguro el amor de la perrita Lili hacia su amo Andrea. Andrea está estupefacta cuando puede saber del valor que posee la perrita de un millón de dólares por raza, sentimiento, seguro, cuidado, amor, ternura y cariño. La perrita ¨poodle¨ Lili se alimenta de comida seca, de frutas y vegetales, aunque, nadie lo cree es vegetariana la perrita. El alimento de la perrita ¨poodle¨ Lili se basa en un desayuno, en un almuerzo y una cena muy balanceada y de rica nutrición de alimentos vegetativos. La vida de la perrita Lili es inesperada, por la mañana, Andrea la lleva al ̈spa ̈ para un masaje perruno y corporal, luego Andrea lleva a la perrita Lili al ¨grooming¨ de perros o canino, y después para concluir lleva a la perrita a la piscina donde relaja sus músculos. La vida de la perrita Lili se torna más segura que un seguro de perros, pero, en un cruel destino la siente acechar el secuestro por un millón de dólares que vale la perrita ̈poodle ̈ Lili. La vida de la perrita Lili está inestable e insegura en la mansión desde que su valor es de un millón de dólares. La vida de Lili es la vida más perruna, más estable, más seria y más elegante y distinguida que la vida de cualquier otro perro. El valor de Lili se calcula monetariamente expresando la palabra por amor, ternura, cariño y por un seguro que cuesta más de lo que vale la perrita Lili. Y, siendo ¨poodle¨ la perrita Lili se percibe que su raza no tiene ningún valor sin el amor y el cariño de su amo y dueña Andrea.
La vida en la mansión para la perrita Lili fue de elegancia, distinción y de una apariencia canina elegante cuando existen secuestradores malévolos por el valor de una perrita ¨poodle¨ y que por un millón de dólares. La vida de Lili corre peligro cuando su valor es por un millón de dólares y nadie sabe su valor ni los secuestradores ni la fama que tiene la perrita ¨poodle¨ Lili. La fama y la fortuna que tiene la perrita Lili en la mansión, en el barrio, en la ciudad y en el pueblo se debe a que el valor de la perrita asciende a más de un millón de dólares. La perrita ¨poodle¨ llamada Lili viaja de un lado a otro con Andrea y ésta vez la perrita Lili visita un ¨mall¨ con Andrea. Es la perrita Lili la sensación, la fama y fortuna en el centro comercial donde se dirige Andrea a realizar compras. La vida de la perrita ¨poodle¨ Lili es el porte y elegancia con distinción que se cuece en el alma cuando se entrega a la pasión en ser una perrita ¨poodle¨. La canina Lili lleva una vida perruna envidiable cuando en el afán de ser nada más una perrita. La perrita Lili siente en su corazón un amor profundo por Andrea, la sigue y la persigue a todos lados en que se dirige Andrea en el centro comercial donde hace compras. Los secuestradores, también, siguen y persiguen a Andrea junto a la perrita ¨poodle¨ Lili de un millón de dólares. La vida de la perrita Lili está en grave peligro y corre peligro su vida, su fama y su fortuna cuando los secuestradores la tienen en la mira por un terrible valor de un millón de dólares. Los secuestradores se hallan en el mismo ¨mall¨ que la perrita ¨poodle¨ Lili y va a la deriva la perrita como si fuera un náufrago perdido en el mar. La vida de la perrita ¨poodle¨ Lili corre un peligro inminente cuando los secuestradores tienen en la mira a la perrita ¨poodle¨ Lili acompañando a Andrea en el centro comercial y realizando compras. La perrita ¨poodle¨, alterada, inestable, intransigente y nerviosa está asustada por tanta gente que la asedia en el ¨mall¨. Los secuestradores la siguen desde una distancia de medio metro y desean secuestrar a la perrita Lili para poder vender y sacar partido y provecho de la fortuna, fama y del valor estimado en un millón de dólares. La vida de la perrita Lili corre peligro y nadie sabe del paradero que le acecha por obtener de ella un millón de dólares. La perrita Lili tiene valor sentimental, un valor monetario, una fama y fortuna en el barrio, en la ciudad y en el pueblo cuando le acecha la maldad a la perrita y el seguro de la vida de la perrita brilla por su ausencia. Los secuestradores acechan con devorar a la perrita con la mirada en el centro comercial donde se halla con Andrea, su amo y dueña. La vida de la perrita Lili corre en ser tan peligrosa como es el mar siendo náufrago perdido. La vida de la perrita Lili se siente atormentada, en encrucijada, enfrascada, cuando los secuestradores la toman por la cadena de perro y las manos atadas de Andrea quedan en libertad cuando no tiene a la perrita Lili en su poder. Las manos atadas de Andrea quedan en libertinaje, en libre albedrío cuando no se tiene en adquisición a la fama y la fortuna del valor de un millón de dólares en el poder. Andrea observa a todos lados y existe tanta gente asediando a la perrita Lili que no sabe quien és el secuestrador de Lili. Los secuestradores acechan con devorar a la perrita y el ¨mall¨ sin percatarse quien es el secuestrador de Lili y el centro comercial sin cámaras de seguridad porque todo sucedió en el año 1935, antes que existieran las cámaras de seguridad. Andrea se ve en la encrucijada en querer amarrar la vida, el tiempo, el amor, la ternura y el cariño de Lili en su propio corazón porque se fue de rumbo incierto, se fue del ¨mall¨ sin dirección fija y se fue sin manos atadas con las cadenas sueltas de una libertad intransigente entre Andrea y su perrita Lili.
No hubo percepción, no hubo condonación, no hubo sentencia, no hubo nada, solamente dos secuestradores, los cuales, se llevan a la perrita Lili de las manos atadas de Andrea con las cadenas sueltas por llevar a Lili entre sus manos atadas y la cadena de perro quedó suelta a la deriva y más que eso volando al aire y en plena libertad. Los secuestradores no median palabra alguna, sólo desean el dinero que puedan obtener del secuestro vil y trascendental de esa perrita ¨poodle¨, en las manos erróneas, y equívocas de unos secuestradores, los cuales, se perfilan malhumorados, hartos de la pobreza, y débiles del alma, llevando a su regazo a la perrita ¨poodle¨ Lili. Y Lili, arrastrada por la correa de perro, sí, por esas cadenas de perro, porque cuando se soltó Lili de las cadenas que la atan de las manos atadas de Andrea, sólo halló y encontró a dos secuestradores de perros por un valor estimado por un millón de dólares en que sólo quieren como recompensa por la captura y el regreso de Lili a la mansión de Andrea. Andrea forma parte de la verdad intransigente, impoluta e indeleble automatizando la nueva espera en creer en el embate de dar una conmísera atracción en caer rendida sobre su lecho y su habitación sollozando y temiendo a perder a su perrita ¨poodle¨ Lili. La búsqueda de la perrita ¨poodle¨ Lili es una búsqueda exagerada, pero, muy certera cuando la perrita Lili está secuestrada, existen varios sospechosos de la desaparición de la perrita Lili. La perrita Lili se halla con una apariencia llena de lodo, su peludo cuerpo está enlodado, ya no es la misma Lili de antes. Y, Lili se halla en una esquina enlodada mientras que todo mundo la busca esperando con esperanza fallida hallar a Lili con vida, sana y salva. Los secuestradores de la perrita Lili se hallan desconcertados por el valor tan inmenso estimado de un millón de dólares de la perrita ¨poodle¨ porque la perrita se halla enferma por tanto lodo y suciedad en su cuerpo peludo. La perruna o la canina se halla en una esquina enferma, adolorida y sin alegría. Andrea y las autoridades buscan infructuosamente a la perrita Lili desatando un caos o una euforia por hallar el paradero de la perrita ¨poodle¨ Lili. Los secuestradores no dejan huella alguna, rastro alguno ni camino ni destino que seguir en la desaparición de Lili.
No hay redención, no hay tiempo ni vida ni amor ni ternura ni cariño, desde que a la perrita ¨poodle¨ Lili ha sido secuestrada en el ¨mall¨. Andrea no tiene vida, ni amor, y las discusiones regresan a la mansión desde que la perrita ¨poodle¨ ha desaparecido de la vida de Andrea y de la mansión. Andrea es como un paño de lágrimas, llena de dolor, pena y lágrimas acérrimas como ubérrimas, cuando en el trance imperfecto de la vida se vio atormentada, fría y abatida la autoridad tiene a varios sospechosos de la desaparición de la perrita ¨poodle¨ Lili. Uno es el jardinero, el otro es chofer, y el otro un sirviente de la mansión. Y, ¿por qué el jardinero, el chofer o un sirviente querrían a la perrita ¨poddle¨ Lili?, y todo por un millón de dólares que se estima el valor de la perrita ¨poddle¨ Lili. El jardinero un joven llamado Adler, cuando pudo saber del valor de la perrita ¨poddle¨ Lili, sus ojos abren como un símbolo de riquezas entre sus ojos. El chofer José sólo dijo que tiene el valor como grande es la perrita ¨poddle¨ Lili. Y el sirviente cuando pudo saber el valor de la perrita ¨poddle¨ Lili, expresó que… ¨ay, tanto dinero, y que por una perra¨. El sirviente tenía una perrita, pero, de raza sata y era su mayor tesoro como para Andrea la perrita ¨poodle¨ Lili. En cambio para el jardinero y el chofer no tenían perros en su residencia. La autoridad le expresa a Andrea que ésos son los únicos tres presuntos sospechosos que posee la autoridad en contra y en la tentativa del secuestro de la perrita ¨poddle¨ Lili desde el centro comercial donde fue secuestrada desde que las manos atadas con cadenas de Andrea y con la cadena de perro quedó suelta y con pura libertad. La vida de Andrea se torna exasperada cuando no halla a la perrita Lili ni por cielo, mar ni Tierra. La búsqueda de la perrita Lili se torna intransigente, autoritaria y con una búsqueda exhaustiva cuando la perrita Lili sin aparecer ni en los alrededores ni en el ¨mall¨ ni en la mansión.
Si la perrita ¨poddle¨ llamada Lili sólo dejó una carta suicida, en la cual, sólo petrificó su esencia como canina o perruna en la mansión como una sola verdad insistente cuando a la verdad se edificó su insistente corazón en saber que ama la perrita ¨poddle¨ Lili sólo a su amo y dueña Andrea. Cuando en el afán de creer en el alma una sola verdad impoluta se edificó una carta suicida de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili, como una carta de corta vena. El corazón de la perrita puede latir como el corazón muerto de un susto. Y la carta suicida de la perrita llamada Lili se torna intrínseca, herida, abatida, y en un mal estado tanto en la peluda y perruna piel, cuando en la insistente carencia de la mansión está llena de lodo y arrinconada en una sola esquina, por donde se pasean las ratas y demás animales como zabandijas. Porque cuando en el tiempo y más como en el trance perfecto en caer sobre el suelo como una cosa sin tiempo y ni un sólo porqué y tan desnudo como la carta suicida de la perrita ¨poddle¨ llamada Lili. Cuando en el deseo y más en el embate de dar por primera vez en el alma de Andrea como una verdad impoluta. Cuando en el silencio y la carta suicida de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili. Porque en el acometido frío y tan friolero de un instante se vio como la frialdad en el silencio de un sólo mal instinto, cuando en el alma de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili, se siente como un todo lodo frío y tan friolero como el agua de cristal, pero, en el adverso sin ser viceverso. Cuando en el alma de Lili se siente como el lodo, sin la alegría, la ternura ni el amor de su amo ni de su dueña Andrea. Y Andrea como en el instinto suave y delicado de la triste mala situación se ve atormentada, fría y abatida de una sola era como una sola trascendencia. Y la perrita ¨poodle¨ llamada Lili, se siente fría y destrozada sin el amor ni el cariño ni la ternura de su amo ni de su dueña Andrea. Cuando en el opuesto del trance de la verdad, quedó todo como una vil y cruel mentira cuando la carta suicida de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili quedó como una sombra, la cual, quedó como la sombra del mismo sol sobre ese suelo donde yace la perrita ¨poodle¨ llamada Lili. Y la carta suicida quedó grabada por siempre en la mente de Andrea, como en el alma una sola fría verdad, cuando en el alma de Andrea se vio friolera como el agua o como el cristal roto en el suelo. El alma de Andrea se vio mortífera como la gran espera inesperada de dar una sola mala insistencia como en el gran tormento, frío e inestable como el mismo dolor, frío e indecoroso. Andrea, en el trance de lo imperfecto se siente como la fría verdad inerte cuando la autoridad le hace leer una carta suicida de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili y Andrea, lo que más en el trance de la fría verdad, se siente como un pasaje de ida y sin regresos, y sin más que el delirio frío e inerte como la misma impoluta verdad en poder creer que esa carta era de su perrita Lili. Si en el alma de Andrea se torna exasperada y con un frío tormento se siente como un delirio delirante y en amarga soledad y de una sola mentira y tan funesta como el delirio frío. Y Andrea sintiendo en el alma una sola frialdad se debe a la carta suicida de la perrita llamada Lili. Y, ¿quién escribió la carta suicida de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili? ¿El secuestrador?, pudo ser el jardinero, el chofer o el sirviente en la mansión donde reside Andrea y sus padres. Los padres de Andrea están consternados por el vil momento en que se debate una exasperación inconclusa de deleite mortal y tan letal como leer esa carta suicida.
Al leer esa carta suicida de la perrita Lili, Andrea y las autoridades la buscan por cielo, mar y Tierra, desmoronando el insistente como la vida, pero, la más pura verdad es que la perrita está secuestrada. Y la perrita ¨poodle¨ llamada Lili, en un lodo frío y tan álgido como la nieve fría, se siente como una perrita abandonada, callejera y sin amo ni dueño alguno. La autoridad pone en jaque al jardinero, al chofer y al sirviente como los tres grandes sospechosos de la perrita ¨poddle¨ llamada Lili. La búsqueda trasciende fronteras, murallas y hasta cielo, mar y Tierra. Y los sospechosos sin saber ni percatarse que son sospechosos de la desaparición de la perrita ¨poddle¨ llamada Lili. Y Lili sin apenas ver el cielo con tanta alegría y felicidad que tenía cuando su amo era la jovencita Andrea. La perrita Lili preciente desaparecer a su alma cuando está llena de lodo, llena de una suciedad extrema y de un dolor inconsecuente en su lana peluda de canina y de raza ¨poodle¨. La vida de Lili va de peor a mal tiempo cuando su vida tiene un valor de un millón de dólares, los cuales, pueden valer hasta más en dinero extranjero. La vida de Lili corre un gran peligro con los secuestradores a la deriva por un dinero que ellos desean, pero, en verdad que ya la perrita no vale un centavo de como está Lili descuidada, abandonada y herida. La búsqueda de Lili fue extrema por cielo, mar y Tierra buscando el paradero de la perrita Lili y Andrea con pancartas buscando a Lili desesperada y exasperada se ve en la frontera entre la muralla y el valle dejando a la mansión en búsqueda de Lili. La ¨poodle¨ llamada Lili se siente fatigada, herida, enlodada y sin agua de cristal se torna exasperada, fatigada, con lengua cansada y sucia. Y Andrea devastada con la euforia en exasperación innata de su pobre proceder cuando en el embate se debe a que la vida cree acabar en un instante de un momento tan cobarde como poder dar rienda suelta a la búsqueda de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili. La vida de Andrea está electrizantemente abatida, adolorida, con llanto en sollozos en los ojos y con manos atadas dejando aquella cadena en libertad de la perrita ¨poodle¨ Lili. La vida de Andrea se torna inocua, pero, muy desesperada en la búsqueda de su perrita Lili. La perrita Lili exhausta, cansada, fatigada y enlodada, no tiene más vida ni más alegría que aquel amor, ternura y cariño que tuvo de su amo y dueña Andrea y hoy secuestrada la perrita Lili sólo pide y anhela regresar al lado de su dueña Andrea. La búsqueda de Lili se torna intransigente cuando la perrita no aparece ni en los alrededores ni en la avenida ni mucho menos en la mansión cuando se torna exasperada la búsqueda de la perrita Lili. Los ojos y el alma de la perrita Lili se sienten desorientados cuando no halla a su dueña a su lado y desespera tanto y por tanto que sus ojos quedan desorbitados, desorientados y heridos. Los secuestradores poseen a la perrita Lili sin dimes y diretes, sólo esperando la suma de dinero que asciende y equivale a un millón de dólares americanos, pero, los secuestradores son extranjeros. La perrita Lili corre un gran peligro cuando en el altercado frío siente a su corazón paralizar cuando el alma está fría y tan enlodada que apenas recuerda a su vida tan elegante, distinción, de gran porte y aparente elegancia en la mansión cuando en el imperio de la mansión yace la búsqueda exhaustiva de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili. La vida se aferra al desierto friolero de intransigente codicia cuando la ambición es sólo el maldito dinero. El valor de la perrita Lili equivale y asciende a un millón de dólares, pero, los secuestradores exigen más de un millón de dólares y en dinero extranjero. La mansión no transige más y desean a la perrita sana, salva y con vida. La vida de Lili corre un gran peligro fuera de la mansión, enlodada y con ojos desorbitados. La autoridad, Andrea y la mansión buscan desesperadamente a Lili.
La perrita Lili sin aliento alguno, con heridas y con ojos desorbitados va en busca de una salida por su secuestro, es el ladrido que le renace a la perrita cuando es casi el último suspiro de la perrita y es un ladrido que reconoce Andrea desde la mansión. Cuando en el trance perfecto de la vida de la perrita ¨poddle¨ llamada Lili, se ve y se torna exasperante un sólo ladrido, una sola vida y una sola existencia cuando la perrita vive y tiene más vida que nunca. En la mansión se torna inocua, pero, muy trascendental, muy viva y muy insistente la vida tanto de Andrea como la de sus padres. Andrea va en busca de su perrita ¨poodle¨ llamada Lili cuando Andrea ilusionadamente y alucinadamente escucha en la mansión el ladrido de un llanto doloroso de la perrita Lili, pero, sin mediar palabra ni caso no le hace el mínimo pormenor caso a ese ladrido. La vida sólo se torna exasperada como es la búsqueda de la perrita Lili. La perrita Lili va en busca de una mala situación cuando en el afán de dar una sola verdad es que la perrita se halla secuestrada por una vil cadena de secuestradores de perros, cuando su valor está estimado sobre el millón de dólares. La cifra estimada del valor de la perrita Lili se percibe en la raza, el tiempo de nacida y sus papales al día como vacunas, y el valor de un seguro de vida que posee la perrita Lili. Los secuestradores sólo se perfila el cometido en hacer cobrar el dinero, en dinero extranjero, por el cual, posee más valor que en dólares americanos. La vida de la perrita Lili se torna más escasa, más débil e inconsecuente y en debilidad y sin tener alimento de comida seca, vegetales y frutas, como era su alimento en la mansión de Andrea y sus padres. Andrea escucha nuevamente el ladrido de la perrita llamada Lili, cuando en la alucinación y debilidad mental por la búsqueda de la perrita Lili, se siente tan cansada como abatida, como tan herida como la pérdida de la perrita llamada Lili, cuando en el trance perfecto de la existencia se siente como el pasaje de ida y sin regresos cuando el tiempo transcurre como la vida pasa desapercibida cuando en el tiempo y más en la debilidad y enlodada la perrita llamada Lili se siente como un perro callejero, solitario y en la amarga soledad se siente en la esquina como una perrita sin cariño ni amor ni ternura de un amo o su dueña Andrea. El ladrido era fuerte y claro y muy contundente, tanto el jardinero, el chofer y el sirviente no se hallan presentes en la mansión porque el jardín ya se había cortado, el chofer todos están en sus faenas, y nadie necesita de la asistencia del chofer, y el sirviente era su día libre. Y Andrea y el ladrido de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili, alucina como nunca el ladrido de Lili, cuando en en el afán de hallar a la canina como poder encontrar con vida, sana y salva a la perrita Lili, se ve y se siente como el hechizo de una bruja y sin antídoto alguno. Si el ladrido de la perrita llamada Lili, se torna más exasperante que nunca, y más alucinadora que jamás y que nadie más en la mansión. En la mansión arde la búsqueda de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili y más se siente el sonido del ladrido exasperado del llanto y sollozo de la perrita Lili y Andrea lo percibe, y lo escucha, pero, no hace nada, si sólo Andrea dice que es sólo alucinación. Y el ladrido de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili, sólo se percibe como un ladrido desesperado, en sollozo y con lágrimas de dolor. La señal del ladrido de Lili es una sola señal efímera como es tan leal, como el amor honesto de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili cuando en el afán de dar una sola señal efímera, pero, muy honrada como era el llanto sollozo de un debilidad por falta de alimento y por un hambre voraz por ser secuestrada, abandonada y dejada en un esquina como cualquier cosa, siendo la elegancia y la distinción con porte inigualable. La perrita ¨poodle¨ llamada Lili, se tornó exasperada como el vivo tormento en querer amar a su amo y dueña Andrea.
Andrea con un sufrimiento indeleble quedó adherida sintiendo el amor por una perrita ¨poodle¨, la cual, llamó Lili y con un sólo dolor en el alma, cuando su desesperación inocua fue trascendental y como el ave vuela lejos dejando partir con el acervo a la cría. Cuando en el trance de la verdad se aferró Andrea sintiendo el alma desafiando el pobre ladrido que escucha de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili. Andrea va en rumbo incierto sin saber a donde llegar cuando de repente ve en alucinación a una perrita muy parecida a la perrita ¨poodle¨ Lili y Andrea siente persuadir su instinto, manipular su camino y descifrar la incógnita secreta del secuestro cruel y tan vil como lo es el de su perrita ¨poodle¨ Lili. La visión fue secreta como deliberando una salida sin ser putrefacta a la vida, al tiempo y al deseo de ver nuevamente a su perrita ¨poodle¨ Lili. Ingratamente fue indeleble el trance imperfecto de creer que la perrita Lili se halla enfrente de su amo y dueña Andrea, pero, sólo es una alucinación que es indeleble como la razón perdida por la perrita ¨poodle¨ Lili. Andrea observa a su alrededor y sin ver a Lili, se llenó de un amor indiscutible, el más leal, y sincero, pero, en el trance perfecto sólo vio y miró a una perrita disfrazada de Lili. Esa perrita que miró y observó en alucinación le brindó fuerzas, paz, y mucho más, le dio ímpetu e hincapié para continuar con la búsqueda de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili. Y la perrita enlodada, sucia y echada en una esquina, sólo se tornó exasperada, fatigada y con lengua cansada la perrita Lili y con hambruna de hambre perruna va en busca de su amo y su dueña, pero, ya casi sin poder recordar a Andrea. Si Andrea quedó como una mojigata entre pancartas y fotografías de la perrita ¨poodle¨ Lili. Si Lili no sabe que la busca su amo y su dueña Andrea. Hace falta amor, cariño y ternura por parte entre ambas partes del amor que existe entre la perrita y Andra. Andrea en esa calle ve en alucinación a Lili disfrazada, pero, con otro amo y dueña, y sólo se imagina y sospecha que sí que la perrita regresará a la mansión, al amor, cariño y ternura de su amo y dueña Andrea. Sólo fue una alucinación, pero, aunque Andrea afirmó que observó a la perrita Lili y quedó completamente más infructuoso poder hallar a la perrita ¨poodle¨ llamada Lili, de un valor estimado de un millón de dólares. Ese millón se estima en la raza ¨poodle¨, en el valor del seguro, tanto sentimental como amor de la perrita Lili. La vida de Andrea se torna exasperada en la búsqueda de Lili, y la autoridad ya exhausta por la búsqueda de la perrita Andrea les expresa -¨no pierdan la fe ni el ánimo, hay que seguir y continuar en la búsqueda¨-. Andrea llega a la mansión y en su habitación y encerrada en su interior solloza bajito en su almohada y en su cama, en la búsqueda de la perrita Lili, y se pregunta -¨¿por qué no te encuentro Lili?¨-, y Andrea sólo desea hallar a su mascota, a su perrita y a la canina y perruna perrita ¨poodle¨ llamada Lili. Y Lili se vio mal inconsecuente, se vio sufrida, decaída y malherida y en un trance indeleble por la huella imborrable de Lili y más cuando está llena de lodo. Y Lili con ojos desorbitados y desorientados y todo porque se halla atada en el secuestro tirada en una esquina, con sed, hambre y esperando a que los secuestradores adquieran el dinero en extranjero cuando se concordó con la autoridad y exigen la recompensa en dinero extranjero. Los secuestradores tiene a la perrita Lili, ¿será el jardinero, el chofer o el sirviente o gente extraña que tienen a la perrita Lili secuestrada?, ya se entrevistó al jardinero, al chofer y al jardinero, y les parecen buenas personas, pero, ni así son super grandes sospechosos. La perrita Lili se halla desmejorada, herida y con hambruna perruna y de una canina de raza ¨poodle¨ y el alma y el corazón muy débil.
Sí, en la alucinación de Andrea con la perrita Lili de paseo cuando la observa como una gran sorpresa irrumpiendo en un sólo encuentro entre Andrea y su perrita ¨poodle¨ Lili, si en el alma de Andrea se torna desesperada por hallar con vida, sana y salva a la perrita Lili. Si en el momento y en el instante siente como la perrita en alucinación sin conocer la caricia de Andrea ni aquellos buenos momentos entre Andrea y su perrita ¨poodle¨ Lili. Lili no conoce ni reconoce a Andrea porque se miran a los ojos directamente, pero, no, no hay contacto visual, no hay forma de una caricia, de un amor, una ternura o un cariño. Si se torna intrínseca la distancia entre la perrita ¨poodle¨ Lili y Andrea. Cuando en el afán de dar directamente un amor al acecho se torna opaco y con tenue luz descendente e incandescente cuando en el embate de la vida se torna exasperante por encontrar con vida a la perrita ¨poodle¨ Lili. Y Lili sin poder reconocer a Andrea en aquella alucinación sorpresiva de la vida y por la desesperación inocua de hallar a la perrita Lili con vida, Andrea la mira y la observa y es la misma, pero, aunque un poco disfrazada si posee un lazo y una bufanda, y aunque era una alucinación, la perrita Lili no reconoce a Andrea y queda por siempre adherida a la vida y a la suerte. La perrita ¨poodle¨ Lili no reconoció ni la voz ni el amor de Andrea, su amo y su dueña, la que con manos atadas quedó sin estar adherida a esas cadenas que le tenía a la vida de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili, porque sus manos atadas quedan en una cruel libertad. Porque cuando se rompió la cadena dejando la cadena en libertad es que la perrita ¨poodle¨ llamada Lili, se escapó y los secuestrados que persiguen a Andrea la acogen y la secuestran. Si el valor estimado de la perrita Lili es de un millón de dólares y desean los secuestradores que sea en dinero del extranjero de donde pertenecen ellos. Porque cuando los secuestradores de la perrita Lili observan a la perrita en una esquina saben una cosa que está moribunda y ya sin vida ni amor ni ternura ni cariño y está enlodada con lodo y fango sucio le ofrecen alimento y agua, pero, ya casi era muy tarde. La vida de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili corre un peligro y es un peligro inminente. Cuando en el embate de la gente y la autoridad en búsqueda de la perrita ¨poodle¨ Lili, se ve en la muralla clandestina en sobrepasar la vida o la misma muerte. La perruna o canina llamada Lili, se ven en la eterna encrucijada y los secuestradores desisten de su cometido, y sin saber lo que le depara a la perrita que tiene un valor de un millón de dólares. Cuando en el alma de la perrita está en un hilo de existencia y de vida queriendo en vez de vivir poder morir en paz, pero, hay una señal para Andrea, y es el ladrido sollozo e impetuoso que en el alma tienta en el imperio sosegado. Y los secuestradores desisten en la idea en cobrar la recompensa por la perrita ¨poodle¨ llamada Lili, cuando la observan decaída, herida, sucia y enlodada. Los secuestradores se acercan a la mansión y desean dejar a la perrita allí tirada frente al portón de la entrada, cuando la perrita ¨poodle¨ llamada Lili está enlodada, enfangada, sucia y casi moribunda y su perruno pelaje cada vez más sin acicalar. Cuando el instante y más en el comienzo en ser moribunda la perrita se torna intrínseca y con un dolor de un alma sin luz, ni amor ni ternura ni cariño. Cuando a la perrita la abandonan allí frente a la entrada de la mansión dejando un sólo mal tiempo y tan desafortunado como la misma ira y desconsuelo que posee tanto Andrea como la misma autoridad. Si el alma de Andrea se torna exasperada, pero, muy inocua y abatida se da la vida y la pobre existencia en hallar a la perrita ¨poodle¨ llamada Lili, y Lili allí tirada frente a la entrada de la mansión, sólo recordó la perrita Lili al portón de la entrada de la mansión y toma fuerzas de donde no las tiene y se levanta con debilidad, pero, con ímpetu y con fuerzas destrozando la vil forma y manera de dar una sola voluntad en poder creer que está Andrea allí en la mansión y sí que está allí Andrea. La perrita entra solita y con débil corazón a la mansión dejando inerte la vida y más el corazón demostrando que el amor, y la ternura y el cariño. Y con saber que el universo y el mundo son parte de la realidad eficaz y de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili, corre en el jardín con veloz movimiento si sabe y reconoce a la mansión y el jardinero la halla débil y casi moribunda cuando en la mansión se siente con fuerzas, con amor y con ternura cuando al acecho va la perrita ¨poodle¨ Lili hacia la cocina y encuentra calor con el sirviente y el chofer llega a la mansión y entra por la cocina y ve a la perrita ¨poodle¨ Lili, allí tirada, enlodada y sucia por un vil y atraco secuestro. El jardinero, el chofer y el sirviente se dedican a brindar los primeros auxilios a la perrita ¨poodle¨ llamada Lili. Llega Andrea a la mansión y nota algo raro e inusual en la perrita y es que está desmejorada, débil y tan herida que corre con ella al doctor, sí, al veterinario. Y el doctor certifica que está a punto de morir la perrita ̈poodle" llamada Lili. Y Lili pestañea sus ojazos de color café en esos ojos de color azul como el eterno mar y abraza a Andrea y le brinda calor, cuando la perrita ¨poodle¨ llamada Lili muere en el acto y más en los brazos de Andrea. Y Andrea le pregunta a esos tres sospechosos de la perrita y hubo entrevistas y más que eso dudas en el tiempo y más en la mansión de los padres de Andrea, cuando sólo ellos tres comparecen a juicio y todo se da de la vil forma como la misma forma en que la perrita ¨poodle¨ llamada Lili desaparece, cuando las manos atadas de Andrea quedan a la deriva y en una eterna libertad cuando en el acecho aquella tarde en el ¨mall¨ la persiguen el chofer y el sirviente como siempre y el jardinero esperando por el secuestro de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili en la mansión. Y las manos atadas de Andrea quedan en plena libertad, pero, siempre encadenada a la cadena hacia la vida de la perrita ¨poodle¨ llamada Lili.
FIN
- Autor: EMYZAG (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 1 de enero de 2024 a las 00:07
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 5
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.