Sólo por estas manos
despliego las estrellas en verano.
La biomasa inasible, la verdad,
y esta felicidad,
reposa en manos huecas.
Dos agujeros negros
alojan siempre vastos universos
lo concreto, lo duro, y lo que sueñas,
y las fronteras hienden
y las conviertes en profundidad.
El roce es suficiente,
la ruta de los dedos
que se asimila con la vastedad,
con el don de los besos.
Y quién sabe lo que con las caricias
puedan mis manos darle a esta vida.
José Luis Galarza (Calchaquí, Santa Fe, Argentina: 2019)
- Autor: J.L.G. (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 13 de enero de 2024 a las 09:07
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 22
- Usuarios favoritos de este poema: Lualpri, jvnavarro, Classman, Violeta, Pilar Luna, JacNogales
Comentarios2
OOh una entrega total y sin medidas elegante y muy sutil, saludos José.
Gracias Violeta, a veces ni imaginamos cuánto podemos cambiar con nuestras manos. Saludos
Muy bonito poema, cercano al espacio infinito, verdadero o imaginado. jaja, parecés astrofísico y enamorado al mismo tiempo.
Jajaja gracias Lucy por tu comentario, a veces es verdad, en otras oportunidades parece que olvidamos esa energía. Saludos
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.