No recuerdo en que momento la noche de lluvia ha dejado de atemorizarme.
No se cuándo nos hemos hecho confidentes, casi amigos.
Fue quizá cuando conocí a esa mujer lujuriosa, absorbente, celosa, llamada Insomnio.
Tal vez ella, con su obscenidad de lecho y espanto, me metió en el burdel del recuerdo urgente, de las pasiones obscuras, entregándome a los brazos de la noche.
Quien sabe….
Hoy ya no le temo a la noche.
Casi siento pena por ella.
Ella con sus sombras y tormentas huyendo en cada amanecer a buscar refugio quien sabe donde.
Escapando de mis sueños.
Escapando de mis amaneceres.
Lhs 🇦🇷
- Autor: Pampa Dormida (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 17 de enero de 2024 a las 16:15
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 9
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