Que lentitud la de este reloj que se empeña
en ladrar, en medio del silencio,
por encima del cansado y viejo corazón.
Qué manera de bajar, de ir para arriba
yendo hacia lo hondo,
hacia debajo de todos,
mirando el horizonte, bien peinado, orondo
y con el sombrero formal…
¡Algunos nacen tristes, como si nacieran
de su tumba!
Como si llegaran cargados de viejo tiempo,
abandonado,
arrastrando algún cadáver que no quiere irse
todavía, ni ser olvidado.
¡Que lentitud la de este reloj que se empeña
en seguir latiendo…!
- Autor: Matias 01 ( Offline)
- Publicado: 29 de enero de 2024 a las 08:28
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 8
- Usuarios favoritos de este poema: jvnavarro, Texi, alicia perez hernandez
Comentarios2
Muy ingenioso y que el reloj no se pare
Un saludo
Gracias por visitar mis letras,
saludos desde Perú
Inolvidables de bellos versos.
saludos poeta
Alicia, gracias por visitar siempre mis letras, espero este bien
saludos
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