El paseo (parte 1)

Jhetsefany

Salí hacia un paseo
sin rumbo concreto,
ni meta y libreto,
solo a pasear.
Un día de tantos
que mi tiempo ofrece
y lo que acontece
lo dicta el azar.

Iba en mi paseo
mirando tranquila,
y sin ser sibila
pude percibir.
Figura lejana
con porte dudosa
y de tos pechosa
me empieza a seguir.

Un cierto temor
en aire flotaba,
pues alguien hallaba
en mí paso un riel.
Ay, ay, qué bemoles,
¿me quito, me escondo,
me paro, respondo
por qué timonel?

Y así dando giros
con vuelta que vuelta,
trotaba resuelta
para despistar.
Veía el fracaso
del porte cobarde,
más pronto que tarde
él me iba a agarrar.

Ay cosa divina,
café de bodega,
mirar no me niega
detrás del cristal.
Segura, escondida,
relajo mi grado
ante un apostado
de paso marcial.

Lo veo, se acerca,
café será amargo
si no pasa largo
de mi posición.
Mamita llorada
por tiempo infinito,
si es solo un viejito,
no un tosco huevón.

Solo un ancianito
de presencia ajada,
mirada asustada,
brillo de pedir.
Se para, no encuentra,
perdió referencia,
la tos se silencia,
no ve donde ir.

Tristeza dibuja
en tez lacrimera,
ocelos vidriera
parecen llorar.
Suspiros de un alma
que suenan lejanos
y unos pies decanos
retornan su andar.

Hay algo curioso,
café terminado
con propi pagado,
calor en mi piel.
Corriendo me salgo,
impulso me llama,
sin voz me reclama
el andar tras de él..

(continúa.....)

Jhet

Ver métrica de este poema
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.