Fuimos tantas cosas,
a veces amigos y confidentes,
más de una vez amantes.
Fuimos esposos,
fuimos novios.
fuimos rivales en batallas
y otras tantas, parecíamos no ser nada.
Y la hice mía tantas veces,
me hizo tantas veces suyo,
que hoy no se si es mía o yo sea suyo,
si somos de ambos o simplemente,
ni es mía, ni yo de ella.
Nos dimos infinidad de besos,
algunos robados, otros con inocencia,
los hubo por obligación y hasta con rabia y coraje.
Nos besábamos con pasión y desenfreno,
todos los besos fueron únicos, pero, el primer beso,
¡Ese beso inocente lo llevare en mis pensamientos!
Fuimos primavera y florecíamos como ningún otro jardín,
fuimos invierno y nos arropamos del frio desolador.
fuimos otoño y aun sin nada salíamos avante,
pero el verano pinta avasallante.
Fui suyo a placer,
fue mía a mas no poder.
fuimos hoguera, llamarada, frenesí,
fuimos caos, problemas y aún la marcha seguía.
pero la monotonía,
trajo consigo un tempano de hielo que nadie se atrevió a romper
y fue más fácil decir un hasta luego.
¿Qué somos hoy?
Seguramente, lo que nunca hemos sido,
quizás la lejanía nos haga reflexionar y ponga las cosas donde debe,
y en un futuro más proximo que lejano la tenga en mi regazo,
vuelva a ser mía,
vuelva a ser suyo
volvamos a ser de ambos.
- Autor: Leo Avendano ( Offline)
- Publicado: 17 de febrero de 2024 a las 02:25
- Comentario del autor sobre el poema: a veces llega el momento en que la monotonía afecta las relaciones, al punto de poner en jaque la relación y solo queda preguntarse ¿qué somos? quizás lo más sano sea ser solo amigos, o el tiempo acomode las piezas en tablero y el juego del amor inicia una vez mas.
- Categoría: Amor
- Lecturas: 11
- Usuarios favoritos de este poema: jvnavarro, Starlight, lujan3616
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