En las tierras áridas de Mexicali, bajo el sol abrasador,
florece la historia de una chica llena de belleza y fervor.
Con ojos como el cielo azul, y cabello como el trigo dorado,
la chica de Mexicali es todo un mágico tesoro anhelado.
Su risa era como música que alegraba el corazón,
y su andar ligero como brisa, era pura tentación.
Los hombres de la región suspiraban al verla pasar,
pues la chica de Mexicali tenía ese don de enamorar.
En las noches estrelladas, en el baile del pueblo bailaba,
con gracia y con soltura, su increíble belleza resaltaba.
Los ojos de los caballeros se posaban en ella con fervor,
pero ninguno lograba conquistar su corazón con amor.
Hasta que un día llegó un forastero, con mirada de pasión,
enamorado al instante, le compuso una canción.
Con palabras dulces y gestos sinceros, conquistó su corazón,
y juntos bailaron al ritmo del amor sin restricción.
La chica de Mexicali encontró en él su alma gemela,
y juntos en el desierto tejieron una historia bella.
Su amor era como el oasis en medio de la sequedad,
una fuente de vida y esperanza en la aridez de la realidad.
Así, la chica de Mexicali encontró su destino,
y en los brazos de aquel forastero su amor cristalino.
Y en las tierras áridas de Mexicali, su historia quedó grabada,
la chica y su amado, en un cuento de atracción inmaculada.
- Autor: Brian Carmona ( Offline)
- Publicado: 26 de febrero de 2024 a las 00:18
- Categoría: Amor
- Lecturas: 19
- Usuarios favoritos de este poema: Lualpri, jvnavarro, Mauro Enrique Lopez Z., Romeo Trigueros, Melissa 94
Comentarios2
Gracias por tus letras, amigo poeta!
Buenas noches!
Me gustó mucho!! 👏👏
¡Muchas gracias!
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