Hola hermanito Víctor:
Hoy tenía necesidad de escribirte para decirte lo mucho que te estimo y amo. Recuerdo por primera vez que mamá Juana te puso en mis brazos. Eras tan pequeñito que temía hacerte daño y a la vez me invadía un gran cariño y amor de estar contigo en nuestra familia. Fuiste el primero en mi vida que me llamó "Papá" siendo yo tu hermano mayor.
Hoy quiero expresarte mis sentimientos de lo mucho que te quiero y a la vez mi agradecimiento de corazón por todo lo que has hecho por mi. Quiero que sepas que siempre has estado en mi vida. Llenaste el hogar de nuestros viejitos y a nosotros tus hermanos, en especial a mi persona, de mucha alegría y felicidad. A pesar de ser el quinto de los hermanos, siendo yo el mayor y tú el más pequeñito. Ahora eres mi médico, gran amigo, confidente y mi guía.
Son muchos los recuerdos que es imposible olvidar el sacrificio de mamá y de papá por nosotros sus hijos para estar unidos siempre. ¿Sabes? Me siento muy orgulloso y a la vez muy avergonzado. Orgulloso porque ustedes siguieron cada uno su camino en la vida y son unos buenos hijos porque os preocupéis por mis viejitos cada día y muy Avergonzado porque me olvide de mis viejitos por el amor de una mujer. Ustedes mis hermanos Jimy, Luis, Rubén y tú Víctor me han dado una lección de humildad y amor a los padres. Mamá nos enseño: Compartir lo poco que teníamos en la mesa para satisfacer nuestro hambre".
Eres un hermano maravilloso. Eres un gran profesional, lo mismo que mis hermanos y yo que no pude terminar mi carrera porque tome la decisión de elegir mi compañera para conformar un hogar. Cambie a todos vosotros por el amor de una mujer. Desde que mamá me dio la oportunidad de emigrar de tierras chimbotanas para un futuro mejor, ya que estaba en una situación tan crítica, me dedique únicamente a brindar cariño y amor a mi hogar en tierras extrañas, que me olvide de todos ustedes, que solo me dedique a vivir y disfrutar la vida. Solo reiterarte que cambiaste mi mundo desde muy pequeño al llamarme "Papá", que es muy importante esa palabra para mi. Me gustaría siempre oírlo. Fuiste y serás siempre mi pequeño Víctor.
Ahora que ha pasado el tiempo sigues formando parte de mi y te agradezco de corazón de ofrecerte ser mi donante desde el primer día que supiste mi caso de Cáncer a la Medula Ósea y estabas dispuesto a acudir a la madre patria donde yo me encontraba. Solo decirte que esa opción sigue en pie pero te manifiesto que yo quiero ser mi propia alternativa en esta primera fase. Me comprenderás y no me cansaré de agradecerte tu amor incondicional para distraerme con tus apreciaciones y darme esas ganas de seguir sonriendo a la vida a éste ritmo agitado del destino.
¿Sabes? Eres un regalo de Dios. Lo mismo que mi caso es una Bendición de Dios. Mereces que te lo diga lo mucho que te amo. Gracias por tus palabras de aliento. Por esos consejos, a pesar de la distancia, para levantarme el ánimo y soy muy afortunado de tener un hermano como tú. Gracias por ese amor, ese cariño y confiar en mi querido hermanito. Gracias por compartir con mis hermanos y viejitos mis ilusiones de vivir y no desmayarme en la vida. Estoy muy orgulloso de ti, mis hermanos y mis viejitos. No he estado a la altura de corresponder ese amor como debería ser y del cual me siento avergonzado. Nunca es tarde para devolver ese cariño, esa ternura y ese amor a todos vosotros.
Vitucho como te llamaba de muy pequeño. Siempre acudiendo al primer llamado. Sabes que siempre estas dispuesto a todo lo relacionado a mi caso pero como te manifesté dame tiempo a cumplir con mis metas y objetivos. Gracias por no dudar de mi recuperación. Gracias por cuidarme a la distancia. La vida continua y lo tomo con optimismo, con mucha ilusión, confianza y esperanza. Dios es mi fuerza en este camino que me ha dado una segunda oportunidad para vivir y corregir mis errores.
Ahora estoy en una fase de recuperación. Por el momento ante todos voy bien pero tu como mi confidente sabes mi realidad. Por esa empatía, escucha activa y ese incansable apoyo que me brindas día a día me fortalece y no me cansaré de reiterarte mi gratitud. Gracias por tus consejos, por comprenderme en mis decisiones. Somos familia y a pesar de los años que nada cambie entre nosotros. Gracias por conocerme mejor que nadie y estar en los momentos más importantes de mi vida.
Agradezco a Dios por estar allí, en las buenas y en las malas, por tu tiempo, por escucharme, entenderme, comprenderme y ser mi donante de futuro. Ese apoyo incondicional lo valoro siempre estarás en mi corazón. Estoy muy orgulloso de ti.
Un fuerte abrazo, te amo mucho. Dios te bendiga.
Tu hermano,
Bolivar Loncaric , Pedro
- Autor: Bolivar Loncaric Pedro ( Offline)
- Publicado: 21 de marzo de 2024 a las 20:10
- Comentario del autor sobre el poema: Un hermano es mucho más que un amigo. Es un compañero incondicional que siempre estará a nuestro lado, es la mitad de nuestro corazón. Al final siempre permanecerá ese vínculo inquebrantable que nace el corazón.
- Categoría: Carta
- Lecturas: 5
Comentarios1
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