Te brindé lo más bonito de mis sentimientos,
mis emociones y mis sueños para ti.
Medite cada noche en mi habitación
pensando cambios en un nuevo amanecer.
Como yo nadie te amará, o tal vez si,
soy tuyo y no me comprendiste,
quisiera cambiar este rumbo
pero tu egoísmo no lo permitió.
Brindamos caricias y ternura
con alegría para el deleite del amor.
La vida continua, sigue adelante, sigue tu camino, no compito.
Es momento de cerrar heridas,
no debemos continuar,
mujer pasional,
que me hace daño verte así.
Devolveré mi amor a la vida.
y espero que la vida me dé su amor.
Levántate, sonríele, que la vida sigue
y que reine la felicidad que nos corresponde.
Se ha perdido el tren de la vida,
el tiempo no perdona,
transcurre cuando menos lo vives
y las oportunidades se toman o se van.
No tienes nada que indagar
tu desconfianza y tus celos
no es nada positivo
para el éxito del amor.
Eres la luz de mi vida
eterna de mis sueños
penetras en mis venas
y te haces dueña de mi corazón.
El amor es puro e innato
que no se vende ni se compra
con el oro del mundo. ¡Sé feliz!
Ama, disfruta, ríe, perdona y vive.
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Autor:
Bolivar Loncaric Pedro (
Offline) - Publicado: 23 de marzo de 2024 a las 19:01
- Comentario del autor sobre el poema: Bello sería el mundo si todos tuviéramos confianza en nuestra pareja. El amor predomina correspondiéndole de manera sensible siendo empático: Comprensión y conexión emocional. La felicidad no es competir es compartir. Debería ser un mundo maravilloso donde impere el espacio para todos con respeto.
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 9
Offline)
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