Girasoles
I
Es curioso que aún te piense, que recorra sobre mí un gran viento helado
Cada te veo, cada que recuerdo, cada te sueño, es que es inevitable
Te veo en todos lados, confundo a la gente, pienso que puedes ser tú
He intentado de mil formas desapegarme, marcharme, pero no es posible
No es posible marcharte de uno mismo.
II
Vuelvo a abrir una y otra vez aquella herida, que no puede sanar
Es extraño que tú y yo seamos unos extraños, evitando desesperadamente extrañarse
Viendo el mismo cielo, las mismas estrellas y sintiendo el mismo frío que solo puede controlarse, con nuestros brazos
Con las frecuencias sincronizadas de nuestros latidos, de nuestras manos
Con juegos de miradas infinitas que terminan en un beso o una sonrisa
III
Tal vez fuimos las personas correctas en el momento equivocado
¿Y si ese momento equivocado ya acábese?, y si ahora es el momento correcto
Y si tan solo curásemos nuestras heridas el uno al otro poco a poco
Y si tal vez y solo tal vez… terminásemos esta historia con un final feliz
Lleno de girasoles, con dulces atardeceres, mirando a la nada y sintiendo todo
Porque contigo los imposibles son posibles y las tristezas son controladas
Porque un día rogué a Dios y me escucho porque ese día te conocí
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