Dulce Virgen María, Madre de Dios.
Escuchando tus oraciones,
no puedo soportar más tus gritos de agonía.
Me resultaría mucho más fácil sufrir, si fuera mi agonía,
verte llorar me duele hasta el fondo del alma.
Viendo tus lágrimas caer, manchando
tu reluciente vestido azul de rojo,
como sangre fluyendo desde tus ojos.
Ver las venas de tu hijo formando riachuelos
desde la base de la cruz,
viendo todo esto, Virgen Madre, lloro por los dos,
incapaz de olvidar vuestros rostros
luchando por resistir el dolor mutuo, la fatiga y la tristeza.
Que quieren nada más que el fin de la tortura,
el dolor lo comparto con ustedes,
y se convierte en el mío.
Pero ya entiendes todo esto Madre María,
estás justamente de rodillas,
resplandeciente en tu vestido azul y blanco,
ahora sangriento.
Cubierto por las lágrimas
de tu luto, la sangre que brotó
de tu amado hijo.
Sin embargo, eres aún más hermosa en tu duelo
llevando la corona de halo resplandeciente
que es tu divinidad.
Escucha al halcón y siéntete tranquila,
no te preocupes, Llegará el día en que todos
te volveremos a ver, en tu vestido
más azul que el cielo.
Tu cara con una hermosa sonrisa,
otra vez tus ojos iluminarán las estrellas
y felices brillarán hasta la eternidad.
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Autor:
Ed-win (
Offline) - Publicado: 31 de marzo de 2024 a las 01:45
- Comentario del autor sobre el poema: La reescribo de nuevo debido a la Semana Santa. La idea me surgió al ver un halcón postrado sobre la cruz de la iglesia de mi barrio.
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 36
- Usuarios favoritos de este poema: Annabeth Aparicio, alicia perez hernandez, Llaneza, Dante Cruz Velez, María C., David Arthur, jvnavarro, MISHA lg, El Hombre de la Rosa, Lucía Gómez, Patricia Aznar Laffont, Pilar Luna, Donaguil, Violeta, Mauro Jesús (mallito), José López Moreno., racsonando
Offline)
Comentarios5
AMEN!! Una constelación de estrellas a tus bellos de preciosos versos.
Abrazos infinitos mi poeta
¡Gracias Alicia! Me encantan las estrellas.
Oh fuerte y sentida inspiración te dio el halcón poeta.
Un abrazo
Muchas gracias, María, por el comentario. El halcón no fue toda la inspiración. Tuve un sueño la noche anterior y escribí una historia acerca del sueño, y al día siguiente vi el halcón y escribí este cuento que también concuerda con el otro relato. Saludos.
A veces hay sueños que inspiran mucho y bello.
bellisisimas letras espirituales poeta gracias por compartir
Escucha al halcón y siéntete tranquila,
no te preocupes, Llegará el día en que todos
te volveremos a ver, en tu vestido
más azul que el cielo.
besos besos
MISHA
lg
Muchas gracias, Misha, por brindarme su apoyo con sus comentarios.Saludos
Rezar es hablar con Dios estimado poeta Norteamericano Ed-win
Le agradezco mucho, amigo poeta. Siempre estoy conversando con Dios y hay ocasiones en las que puedo visitarlo en mis sueños. Saludos
Qué hermoso poema. Es inconmensurable ese amor tan grande que la Virgen le tuvo a su hijo, y esa obediencia de seguir las profecías para no rebelarse y reclamar tan sanguinaria ignomía.
Se trataba de un sacrificio de gran magnitud, que causa tristeza y decepción la conducta del ser humano.Saludos
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