El monstruo que vive en mi.

¿Qué fue lo que nos sucedió?

No reconozco a éstos que hoy veo.

Dos seres que lucharon por estar unidos, enfrentandose a su propio destino, nadando contra corriente, dejando fuera a toda la gente.

¿Quiénes son éstos desconocidos?

Que hoy se ponen tontas máscaras y usan ridículos disfraces, para evitar que otros vean, que no son ni la sombra de lo que un día fueron.

Nos distanciamos tanto.

Parecemos dos extraños.

Entre nosotros hay un mundo que nos aleja.

Ya no tengo a mi pareja, mi amante, mi amigo.

Estoy sola, incluso estando contigo.

Que difícil se hace el iniciar una conversación.

Que triste es dormir a tu lado, sabiendo que nos separa un abismo.

¿Cuando fue que todo ocurrió?

Hubieron problemas, lo acepto, más no creí, en verdad, nunca que aquél fuego se extinguirse por completo.

Hubieron tantas palabras hirientes con las que nos dañamos, tantos actos negativos que sin querer pasamos.

¿Qué fue lo que hoy nos tienen tan separados?

No distingo tu ser y en verdad añoro volverte a tener.

Es como caminar una noche fría y neblinosa. Distingo tu silueta a lo lejos y por más que intento no puedo llegar a ella.

Grito tu nombre sin descanso y corro hasta quedarme sin aliento. Más la neblina es tan espesa y el frío tan duro que detiene mi paso.

¿Dónde estás o dónde estamos? 

Vuelve a mí que te necesito tanto.

Duele respirar tu aroma y no sentir tu abrazo.

Duele tanto amarte y haberte alejado.

¿Cuán enferma estoy? Que todo lo que toco, lo terminó dañando.

He roto ilusiones, aniquilado sueños y aquellas metas que nos trazamos, las detuve sin siquiera dar el primer paso.

Soy un monstruo destructivo, tan nocivo, tan maldito.

Pero tengo un corazón que siente y hoy está mal herido.

Te amo tanto yte necesito a mi lado. A pesar de que sé cuánto te daño. es por ello que me alejo, me aisló, por el miedo que tengo a podar en ti mis manos y romperte tanto como lo hago conmigo misma, desde hace tantos años.

No, no eres tú el extraño, el distante, el lejano. Soy yo la que no sale de éste hermético caparazón, la que no derrumba sus murallas y en lugar las alza más altas. 

Temo, temo tanto, destruirte como lo hice comigo en antaño.

Porque si yo no he podido aún recuperar ni sanar lo lastimado ¿Cómo podría si quiera pensar en estar amarte y poder estar a tu lado?

Yo soy el mal que arraza todo a su paso.

Incluso las migajas que de mi quedaban, las he pisoteado.

Perdóname amor por ser éste ente malévolo y cobarde.

Ese que clava la daga y sale corriendo al ver su mano ensangrentada.

Ese que por más que se arrepienta y pida mil veces perdón arrodillada, no puede perdonarse a sí misma, no puede amarse, así qué ¿Cómo podría si quiera imaginar ser amada?

Si odio mi propia existencia y desearía poder por fin acabarla.

Perdóname por haberme sumido en un limbo, donde el caos es el pan de cada día.

Odiar y amar al mismo tiempo, saber que lleva algo bueno, pero también algo malo dentro.

Perdón por haber llevado ese caso, hasta dónde hoy estamos, provocando vernos c

omo dos ajenos, dos extraños.

Nadmoon