“ROMANCE PARA UN OLVIDO”

En la penumbra de la noche oscura,

se esconde mi corazón herido,

en un romancé para un olvido,

donde el dolor se viste de locura.

Las lágrimas caen como lluvia,

empapando mi alma en tristeza,

cayendo en una profunda melancolía,

como una cruel y fría mordaza.

En cada verso se esconde mi pena,

en cada palabra se ahoga mi voz,

en cada rima se encierra mi condena,

en cada estrofa se pierde mi razón.

Romancé para un olvido eterno,

donde mis recuerdos se desvanecen,

donde mis sueños se convierten en invierno,

donde mi esperanza ya no se vende.

En este romancé de amargo final,

mi corazón se despide sin quererlo,

en un adiós que siento tan real,

en un olvido que pesa como hierro.

Pero a pesar del vacío que me consume,

a pesar de la tristeza que me arropa,

seguiré escribiendo mi romancé sin resumen,

porque aunque duela, el olvido también me empodera.

Y así, en medio de la oscuridad sin estrella,

seguiré cantando mi romancé para un olvido,

porque al final, no importa la guerra,

lo que cuenta es que mi alma siga viva en este camino.

“Serl “