“Registro”
Pasan las capas siniestras
trazando tirabuzones
mientras nos niños se esconden
y los mayores se encierran.
Entran los guardias civiles
en la ciudad de chabolas
van encendiendo farolas
y prendiendo los candiles.
Buscan a Juan Cantizano
persona de malas artes
trasgresor y traficante,
mas por los suyos amado.
Entran a saco en las casas
arrasando lo que encuentran
sin ningún miramiento entran
empujando a las gitanas.
Suenan gritos y sollozos
aquello parece una guerra
donde los enseres vuelan
y se acumulan destrozos.
Pero el gitano no está
¿Quién sabrá dónde se encuentra?
amparado por la niebla
o escondido en el desván.
!Vamos! grita el capitán
las verdes capas se alejan
cortando la densa niebla
dejando el poblado atrás.
Las gitanas ya se afanan
en remediar el destrozo
colocando poco a poco
los enseres de sus casas.
Las farolas se oscurecen
todo vuelve a la penumbra
sollozos y maldiciones
en el poblado se escuchan.
Los niños aún con miedo,
los mayores les acunan
buscando paz y consuelo
en esta noche sin luna.
La guardia civil se aleja
cual fantasmas de ultratumba
dejando tras de sí temores
y derroches de amargura.
- Autor: Francisco J.G. Aguado 😉 (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 6 de abril de 2024 a las 03:42
- Comentario del autor sobre el poema: En mi ciudad, Valladolid, en la década de los 60, existÃa un poblado de chabolas habitadas por personas de raza gitana. Fue sonado aquel registro que se hizo en todo el poblado de chabolas, buscando a un gitano concreto, supuestamente jefe del tráfico de tabaco ilegal y de otras sustancias. Salió en la prensa local por lo violento que fue. Inspirado en esos hechos, hice este poema. Con el tiempo conocÃ, que salvando las distancias, Federico GarcÃa Loca habÃa compuesto el poema Ciudad de los gitanos, donde de alguna manera se relataba un hecho similar ocurrido en la ciudad andaluza de Jerez de la Frontera. Esta es la historia que vivà de muy niño y asà la cuento.
- CategorÃa: SociopolÃtico
- Lecturas: 9
- Usuarios favoritos de este poema: jvnavarro
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