Miro al recuerdo porque no me miran.
Aparece engendrado para siempre
como la flor que guarda su semilla
a la espera del segundo exacto y certero.
Miro como mira el río en el estío,
piedra voraz de muerte,
pajarito sin abrevadero y sin rama.
En ese miro hay encendida esquina
pudriendo lo tangible y su contrario;
no hay más crueldad que la de un eco
si le falta la montaña... si le falta la noche
en la mañana .
El espejo no sabe que sé y, sé... sé que
detrás no se esconde el mirar
como se miran las cosas del alma.
La ventana tiene miedo porque no me miran,
porque cerrar es abrir de par en par
la agónica posada donde pan y vino
ni apaga sed ni trigo descalza.
Miro al recuerdo y, lo miro con ganas,
de saber que nada es la vida
una muerte larga y profunda
como
una
mirada.
Andrés Lakota.
- Autor: Lakota (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 11 de abril de 2024 a las 11:46
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 14
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez, David Arthur, Dr. Salvador Santoyo Sánchez, María C.
Comentarios3
El espejo no sabe que sé y, sé... sé que
detrás no se esconde el mirar
como se miran las cosas del alma.
......
Uf, el alma es sensible a lo que mira, siente y oye, el espejo solo refleja lo que mira por fuera, tus bellos versos dejan en claro la sensibilidad del alma.
Abrazos y saludos poeta Andy
Ahí le has dado, amiga.
Gracias con el alma por tu pasar.
Abrazos y saludos.
Profundidad bien versada.
Un saludo
Gracias, Maria.
También gracias por tu pasar por mis letras.
Saludos.
Solo dispongo de mañanas, pero paso con sumo placer cuando puedo.
Es así, cada uno dispone de su tiempo único.
Completamente de acuerdo poeta.
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