Bajo esta luna radiante y su brillo encantado,
Recuerdo los cabellos de mi madre, blancos y alborotados,
Evoco la espuma de las olas del mar,
Que susurran historias de amor sin cesar.
En cada hebra, un suspiro, un sueño anhelado,
un viaje por la vida, un destino forjado,
cada hilo cuenta la historia de su andar,
tejiendo un tapiz de amor, sin igual brillar.
En su blancura hay la fuerza de mil vidas,
la sabiduría de años, las risas compartidas,
cada mechón, un poema, una melodía,
que canta al corazón con dulce armonía.
Los cabellos blancos de mi madre, tesoro divino,
reflejo de su alma, su amor cristalino,
en cada rizo, un recuerdo, una bendición,
un Rosario, un lazo eterno de amor y protección.
En esta noche serena y en calma reposada,
bajo la luna plateada y su suave luz dorada,
los cabellos blancos de mi madre ondean,
como hilos de plata en la brisa que pasea.
En su blancura hay un susurro de tiempo,
testimonio fiel de cada momento vivido,
caminos recorridos, memorias tejidas,
en la trama de cada hebra, un amor infinito.
Los cabellos blancos de mi madre, un poema,
que relata la historia de su alma serena,
en cada mechón reside su fuerza y ternura,
un legado eterno, una luz que perdura.
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Autor:
El Corbán (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 12 de abril de 2024 a las 06:28
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 9
Offline)
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