En el castillo de mis sueños, donde la luna es testigo,
reside mi dama Gabriela, en un halo de hechizo,
su mirada como estrella, su sonrisa como brisa,
en mi pecho arde un fuego, por su amor que me hipnotiza.
En los jardines del Edén, donde las rosas florecen,
pasea mi dama Gabriela, como un sueño que embellece,
su cabello cual río de oro, su piel suave como seda,
en mi corazón susurra, su nombre, mi dama predilecta.
En la corte del destino, donde se entrelazan los hilos,
susurro palabras de amor, como un fiel peregrino,
ante mi dama Gabriela, mi amor es un océano,
que se agita en la tormenta, en busca de su mano.
En el sueño de mis noches, en el alba de mis días,
vive mi dama Gabriela, en mis versos, en mis poesías,
por su caballeresco amor, seré su escudo, su espada,
hasta que el tiempo se detenga, en esta historia encantada.
- Autor: El Corbán (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 17 de abril de 2024 a las 07:53
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 4
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