Amor que ya no es amor,
de aquel amor ya no hay nada;
nuestro amor se fue muriendo
cual noche al llegar el alba.
Solo quedan la costumbre
y la pasión apagada;
pasión que enciendes con ella,
con él yo enciendo la llama.
Tú te vas con una excusa
por las noches a buscarla
y yo, sabiendo que mientes,
me callo… no digo nada.
Es que yo miento también
cuando salgo hacia su casa,
y tú, que sabes que miento,
escuchas mi excusa y callas.
Y seguimos cada día
por cubrir las apariencias,
con tedio, monotonía,
hastío e indiferencia.
Y pensamos cada noche,
tú en sus brazos, yo en su cama:
¿por qué nuestro amor de ayer
se ha quedado sin mañana?
Amor que ya no es amor,
amor ya sin esperanza,
amor sin beso y caricia,
amor…, ¡hoy ya no eres nada!
Comentarios2
Ufffffff, que escribes, hermoso, poeta, tus letras tienen imán, atrapan, enamoran, este poema es fantástico, en su forma y en su fondo, las ideas, las emociones, que se deslizan a través de sus letras conmueven, llegan al lector, gracias por esta belleza.
De verdad, me siento muy honrada con tu generosísimo comentario. Te agradezco el tiempo dedicado a leerme y comentarme..., sobre todo por ese comentario que es como un impulso a seguir adelante. Mil gracias, amigo mío. Un fuerte abrazo.
cuando la monotonía inunda el alma
y la creatividad huye de la vida
cuando todo se vuelve rutinario
el amor se convierte en ordinario.
Hermosos versos que animan al cambio y el renacimiento del amor.
Excelente
Con cariño
JAVIER
Mejor dicho, imposible.
Mil gracias por tomar parte de tu valioso tiempo leyendo mis líneas y por comentar amablemente. Un saludo afectuoso, poeta Javier.
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