NON OMNIS MORIAR

Ante todo mi deseo de que  donde estés te encuentres mejor…

Esta mañana me he levantado con la idea fija de escribirte una carta y llevo varias horas tratando de poner letras a mis pensamientos y, por supuesto, no puedo comenzar de otra manera que ésta:

Te quiero mucho. Mamá… te quise con autentica ternura, sin tiempo ni espacio, sin forma ni medida, te quise de la manera más elevada que es posible querer a nadie, hasta llegar a ser el más alto objeto de mi veneración. Te quise tanto, en  todo mi tiempo, que ya fue imposible

querer a nadie más como a ti y a papá…Toda mi capacidad de cariño la gasté en ti, tanto es así que se convertirá en ETERNO…

Fue durísimo separarme de ti, (maldito día), y todavía no me explico cómo pude conseguirlo. Recuerdo los días que siguieron a aquella primera mirada de cuna,  de tus entrañas, con tu inolvidable olor, y te aseguro que no se puede estar más cerca de la verdadera inocencia y felicidad. 

Esa lucha(de Mayor) entre lo que debes y lo que quieres y esa especie de espada de Damocles acechando siempre sobre mi cabeza por quererte asi,en cada paseo de vuelta, por tu casa, lo recordaré siempre como algo consolador,apaciguador...

Fueron aquellos  días terribles de escondite, de   lágrimas, de sentirme juzgada, castigada por dedicarme a ti  y condenada, de verme sufrir tanto por  quien tú sabes…pero sobre todo, de miedo tenía muchísimo miedo.  (ya sabes la historia).

Ahora llega el dolor y la pena por el FRACASO, él desapego , el desengaño de la vida, la huida, la incomprensión, mis desvelos, mis ¿por qué?  Y tu ausencia proyectada ya, sin remedio, hacia el resto de mi Vida…

En este año de eclipse solar me siento huérfana, como un periódico que se queda en un rincon hasta que se pudra.En este viaje infinito remando sobre la fina bruma 

volveré a buscar tu mirada ausente para que me abraces la realidad y el pensamiento de saberte de la mano de mi padre. Hoy las luces  de nuestra habitación flotan en silencios extraños, desconocidos.

Que la suerte me busque dignamente y me lleve  a mil poemas.A veces entre las palabras entra la vida.

Todo se apaga ,mamá.Todo parece esperar.

No sé por qué o tal vez si lo sé…pero siempre tuve la sensación de haber sido la  gran perdedora  de esta ,mi  Historia, siempre la sensación de que se forzaron los principios de  la NATURALEZA de las cosas, de que se chantajearon algunas causas y hasta desaparecieron   personas. Y así, hoy, definitivamente, me quedo con tu nombre y mi SOLEDAD…

Cuida de papá  y recibe un último beso en tu piel  de seda; éstos estarán siempre en mi recuerdo…

Hasta pronto mamá, hasta pronto papá.

Antonia Ceada Acevedo