¿Qué puedo reprocharte a ti?
Si tu existencia me lo dio todo a mí
sin tú tener que esforzarte de más,
me diste luz, me diste paz…
Qué pena que no haya podido durar.
Tu llegada me despertó el alma,
me iluminó el corazón,
hizo temblar mis más firmes muros
y sin tanto ruido, uno a uno los tumbó.
¿Cómo se supone que viva ahora
que te fuiste como si nada?
Si hasta te aprendí tus malos hábitos,
tu forma de tomar el café
y cómo acomodas los sobres del té.
Me dejaste la casa de cabeza,
ahora parece que está embrujada
porque siempre pasea tu fantasma,
pero nunca me platica nada.
Por las noches me cuesta dormir,
me acostumbré a que estabas ahí;
por las mañanas es más sencillo
porque sabía que ya te habías ido.
¿Qué puedo reprocharte a ti?
Yo sabía que te ibas a ir
y decidí amarte de cualquier modo,
sin importar cuán doloroso
sería afrontar la realidad
cuando el día de tu partida llegara
y yo me quedara sin ti y sin nada.
No te culpo, yo no sé guardar rencor,
espero a donde vayas te cuide Dios
y sepas recordar que alguien te amó
a manos llenas y de corazón.
- Autor: Quetzalito (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 25 de abril de 2024 a las 00:29
- Comentario del autor sobre el poema: gracias por permitirme amarte, sin importar la brevedad de tu estancia en mi vida, fue maravilloso
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 13
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez, Mauro Enrique Lopez Z., Lualpri
Comentarios1
Hermosos versos de una despedida sin rencor solo mucho amor.
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