Después de cada tormenta aciaga
puedes ver su silueta, estela brillante
y cuidado con ponerle un dedo encima,
en su coraza hay un corazón noble.
Y después de cada rocío, húmedos albores
la ves como un espíritu tremuloso, atemporal,
haciendo su propio camino, fluctuante.
Cargando siempre su propio hogar.
¿Quién te hizo mujer de caparazón?
¿Acaso no veían tus amores?
¿Quién te hizo mujer de pasiones?
¿Acaso no conocerán tu canción?
Lento, dirían, avanzas por tus cargas,
habrás nacido con sueños antiguos,
pero la liebre moderna nunca entenderá
la secuencia infinita de tu espalda
Entonces te veo, ganando la carrera
¿Quién pudo haberlo imaginado?
Quizás solo algunos podíamos verlo,
en esos ojos que arden, ambiciosos.
Y después de cada tormenta, aclara
y puedo ver tu silueta, madura y primaveral
y con cuidado pongo un dedo encima,
bajo esa coraza hay un noble corazón.
Entonces te conozco, veo tus caminos
tierna silueta de brillantinas,
entonces me pierdo y caigo,
caída vertiginosa en el espiral de tu espalda.
Voluta, secuencia de apariciones,
entrecorte de tu existencia.
Ni los vendavales se llevan la memoria
de tus manifestaciones.
Oh! secuencia de apariciones,
dama fantasma, caracola enrarecida,
vuelve, vuelve y hazte presente,
un regalo, mi presente,
hasta el fin del espiral.
- Autor: F-JAZC (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 29 de abril de 2024 a las 13:14
- Categoría: Amor
- Lecturas: 5
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