Si me vieras ahora, tú que atravesaste conmigo
tempestades y vestiste la mitad de mi disfraz,
no me reconocerías, es el precio de ir muriendo,
porque la vida no sabe estarse quieta, de ir perdiendo
la memoria de miles de días.
Es tiempo de ir quemando los viejos zapatos
en una hoguera cualquier noche de duendes.
Volveré al silencio, y me quedaré cerca de la orilla,
por ser el náufrago a quien la noche llama,
porque la noche no es segura
y, a veces, de ella no se vuelve.
Necesito saber que el sol vela por mí
y se halla cerca, a la distancia de una piedra
que viene saltando sobre el agua, o durante
el tiempo que el vino tarda en pudrirse en los odres.
Cansado de esperar aquello que no vuelve,
te seguían mis ojos bajo el repicar del aguacero,
volviendo a estrellarme, una y otra vez,
tras los impasibles cristales de mis lentes
y en ese ir creciendo de las plantas al murmullo
de la luna, mientras los astros arrullaban telescopios.
Si pudiera regresar de aquellos años
en que dentro de mí sonaba tu alegría,
volvería a poner en pie la música y los libros.
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Autor:
Gonvedo (
Offline) - Publicado: 24 de mayo de 2024 a las 09:29
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 13
- Usuarios favoritos de este poema: Tommy Duque, Alexandra L
Offline)
Comentarios3
El tiempo no vuelve, mas queda para siempre la maravilla de los recuerdos, lo que fue, o casi fue, vivir es navegar en mares de nostalgia, de penas en un verano que quema el alma, mas ahí llega la primavera siempre llega con su lluvia de ilusiones. Placer leer siempre tu bella poesía.
Un abrazo, Alex.
Muchas gracias, amiga Alex, por tu infinita presencia.
Un abrazo.
Volveré al silencio, y me quedaré cerca de la orilla,
por ser el náufrago a quien la noche llama,
porque la noche no es segura
y, a veces, de ella no se vuelve.Me emociona leerte mi querido amigo.
Nada es seguro en este mundo, todo es incierto, y desesperante.
Hallarás sosiego¿ l harás?
No esperes, deja que el tiempo pase
la vida se encargará de mostrate lo que tú no puede ver,Un abrazo conmovido,.
Muchas gracias, querida amiga, por tus amables palabras que expresan calidez y consuelo. No estoy en la situación que describe el poema, es pura imaginación y empatía, pero siempre pasamos por determinados momentos en que la vida parece ponernos a prueba. Luego lo llamamos experiencia.
Un fuerte y enorme abrazo.
Muy hermoso poesía de nostalgia José Ramón.
....Es tiempo de ir quemando los viejos zapatos
en una hoguera cualquier noche de duendes.
Volveré al silencio, y me quedaré cerca de la orilla,
por ser el náufrago a quien la noche llama,
porque la noche no es segura
y, a veces, de ella no se vuelve....
Un abrazo amigo
David
Muchas gracias, David.
Buena tarde de domingo y feliz semana.
Un abrazo, amigo.
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