Los espejos son mudos testigos
de telarañas que deja el tiempo,
evocan plumas de níveo cisne
perdidas en el olvidado silencio.
En mi corazón forjé un alcázar,
podé todas las perennes raíces
hacedoras de cruel tormento
que nace en las cicatrices.
Recolecto flores en cada jardín
busco alimento en la inocencia,
se ha desafinado el cansado violín
inmune me he vuelto a la esencia.
Colecciono caricias y besos
sin escatimar en derroche,
intensos, pero perecederos
como un vals de medianoche.
¿Quién me ha otorgado este derecho?
de provocar tanto dolor
sin percibir sí es pasión o amor
lo que aflora en mi pecho.
Antifaz, convertido en frío cristal
pesadilla que muda a realidad
de deliciosa miel derramada,
que en ingenuidad es entregada.
De este leonino juego
no hay envite a perdedor,
insignia grabada a fuego
en mi alma de depredador.
- Autor: Javi77 ( Offline)
- Publicado: 6 de junio de 2024 a las 08:38
- Categoría: Amor
- Lecturas: 20
- Usuarios favoritos de este poema: Dante Cruz Velez, jvnavarro, Francisco Javier G. Aguado 😉, Antonio Martín
Comentarios2
Amor a puñados, sueños y buenas letras
Un saludo
Muchas gracias caballero por vuestras palabras
Javi, eres nuevo sí es que te doy la bienvenido al FORO DE POEMAS DEL ALMA.
Me siento como ese alcatráz, debes de se español aunque ni tienes un perfil, pero ese ave marina es como que me resuena de España.
Tambien Ando podando las raíces de mi árbol genealógico, que me dejaron mis antepasados sin hojas.
Bueno me ha gusado lo que has dejado para leer.- Donde quieras que estes recibe un abrazo poético de esta empedernida poetisa enamorada de l amor.- Felicdades.-
Muchas gracias por la bienvenida Mirta, tenéis razón soy de España, abrazo de luz para voz dama
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