Después de su abrazo
sentí un vacío inmenso,
como si la vida,
en su ironía,
se burlara de mi anhelo.
Nunca besé sus labios,
y ese beso
será un sueño perpetuo,
una fantasía inconclusa
que danza en mi mente.
Los besos son fugaces,
chispas de pasión
que se apagan rápido,
dejando rastros de deseo
y nostalgias silenciosas.
Pero los abrazos,
oh, los abrazos...
son anclas en medio del caos,
son refugios de calma
y certezas momentáneas.
En sus brazos
encontré la paz,
la seguridad de pertenecer,
la sensación efímera
de estar en el lugar correcto.
Ahora, sin su abrazo,
navego en un mar de ausencia,
aferrándome a ese instante
donde todo tenía sentido,
donde el mundo
se detenía en su calor.
- Autor: Diego Pantoja (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 9 de junio de 2024 a las 15:31
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 6
- Usuarios favoritos de este poema: María García Manero 🌸, José Valverde Yuste, alicia perez hernandez
Comentarios2
Bellos versos, estimado poeta.
Saludos afectuosos.
Muchas gracias por tus palabras tan generosas. Me alegra profundamente que hayas disfrutado de mis versos.
Saludos afectuosos.
Hermosas letras nos presentas hoy.
Saludos. Buen día
¡Muchas gracias por tu comentario! Me alegra mucho que te haya gustado. ¡Que tengas un excelente día!
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