Al “machito”
se le cayeron los huevos,
del canasto.
Los quebró todos.
Y cada huevo era su huevo protector.
Al “machito”.
Se le olvidó,
que hay mujeres con ovarios.
Unas que,
si las abofetean,
no ponen la otra mejilla.
No los justifican.
Como cuando va su madre,
como cuando va su madre corriendo a recogerle los huevos del canasto suplicándole a la vida un poco de misericordia para ese niño escoria que nada ha de aportarle a la vida,
¡una misericordia más!
Suplica la pobre mujer por ese niño estorbo con cuerpo de hombre que golpea como tal.
Que insulta como tal.
Que intenta matar como tal cual es,
una bestia.
Es un niño solo en las faldas de su progenitora.
Solo ahí llora.
Solo ahí se agacha.
Solo ahí dice todo lo que no es.
Al “machito”.
Se le olvidó
que es carente de sentido cuando la bola de sus amigos barrigones se enajena por las estupideces que él dice.
Se le olvidó que,
Es carente de cualquier gracia, talento y autoestima.
El “machito”.
Es un niño herido dice su mami.
Y es incapaz de defenderse ante el mundo sin esa mujer pese a que a las demás humilla, acosa y subestima.
Al machito se le olvidó que hay mujeres con más huevos que esa canasta destruida.
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Autor:
AleQ (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 20 de junio de 2024 a las 22:00
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 58
- Usuarios favoritos de este poema: Elthan, Dante Cruz Velez, Mauro Enrique Lopez Z., José Valverde Yuste
Offline)
Comentarios1
Tus letras fuertes y directas, son una crítica profunda hacia la masculinidad tóxica y la violencia que puede emanar de ella. Las dinámicas de poder desiguales y destructivas que pueden surgir de los roles de género tradicionales y estereotipados. La falta de autoconciencia y la necesidad de validación del " machito ", quien busca la aprobación de sus amigos a través de comportamientos dañinos y despectivos hacia las mujeres, perpetuando misoginia y violencia.
Para tener en consideración, sobre los roles de género, la violencia machista y la importancia de una masculinidad más respetuosa y empática.
Los comportamientos tóxicos y destructivos no están limitados exclusivamente a los hombres; también pueden manifestarse en mujeres. La masculinidad tóxica y la feminidad tóxica son conceptos que reflejan normas de género rígidas y nocivas que pueden afectar a personas de cualquier género. La masculinidad tóxica no implica que todos los hombres sean de esa manera, ni que todas las mujeres sean inmunes a estos comportamientos.
Saludos Alexandra.
Gracias por leer y mejor que tú no pudo haber tenido interpretación mi escrito.
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