En un carruaje
dos enamorados se trasladan,
van
así sintiendo,
los rumores que trae
el viento que arrecia,
ya las aguas que se mecen,
en los ojos, pura vida,
que nace y nace,
para cuando de verdad se quiere.
Ya las palabras llenas de amor llegan
entre rosas y tulipanes,
entre verde follaje
que se puede
tentar con las manos,
asir como si
en el fondo de la senda,
que con la noche
en negrura se convierte,
hubiera un perdido paisaje,
con que dar más misterio,
a lo que sin conocer
queremos poner nombre.
Sendas de la vida
en mi nacen,
me recorren los rumores,
de aquellos días y de estos,
todos ellos
latentes,
como el agua de un estanque,
como el corazón del gorrión
en su nido,
terciopelo de seda
transparente,
invirtiendo su fortuna
en criar a sus guachos
para que no terminen
en las garras de los halcones.
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Autor:
jvnavarro (
Online) - Publicado: 22 de junio de 2024 a las 02:50
- Comentario del autor sobre el poema: Me gusta volver en mis escritos a ciertos temas, que dentro de los asuntos diarios que trato en la vida, al final son pura normalidad. Viendo una película me asaltó con violencia inesperada este poema que aquí les dejo. Imágenes reales de la película transcurren por este poema y otras que me reservo para mí. Este es el fruto de una tarde, de hace dos días, en que me puse a escribir y me salió este poema. La película lleva por título "The Quiet Man" en castellano "El Hombre Tranquilo", director Jhon Ford con Jhon Wayne y Maureen O´Hara, en el reparto. Buen día tengan, ya sábado por aquí de madrugada.
- Categoría: Amor
- Lecturas: 2
- Usuario favorito de este poema: Tommy Duque.
Online)
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