De nuevo, tu sonrisa,
limpió mis telarañas
que habían avanzado
cubriendo las ventanas.
Tus letras me animaron,
temblaron mis pestañas
y el agua vino a ellas,
cual brisa enamorada.
Creí que te habías ido,
muy lejos, por montañas
y puede que por sendas
y rutas muy lejanas.
Estaba entristecido,
sin sueños y sin nada,
sumido en la miseria
de miedos y fantasmas.
Veía que mis sueños
con prisas se alejaban
y huían de mis manos
los versos y la calma.
Quería tu sonrisa,
tu voz y tu palabra,
por medio de las letras
que antaño me llegaban.
Y un día, sin pensarlo,
volvieron a mi casa
las letras temblorosas
que tanto deseaba.
Lloró, sin tú saberlo,
un niño en la distancia,
plasmando en sus poemas
la sangre alborozada.
Temblaron sus ojitos,
con brisa satinada
y lluvia de un verano
con rosas y con magia.
Y fueron de un poema,
las flores rescatadas,
con sueños y ternura
en ellos reflejada.
Doy gracias a los cielos
por esa forma clara
de verte en estos versos,
temblando y sin distancia.
Rafael Sánchez Ortega ©
28/06/24
-
Autor:
Pyck05 (
Offline) - Publicado: 1 de julio de 2024 a las 05:06
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 17
- Usuarios favoritos de este poema: jvnavarro, Mauro Enrique Lopez Z., Texi, alicia perez hernandez
Offline)
Comentarios1
dulces como el almibar tus letras poeta , me haces suspirar
gracias por compartir
Lloró, sin tú saberlo,
un niño en la distancia,
plasmando en sus poemas
la sangre alborozada.
Temblaron sus ojitos,
con brisa satinada
y lluvia de un verano
con rosas y con magia.
Y fueron de un poema,
las flores rescatadas,
con sueños y ternura
en ellos reflejada.
Doy gracias a los cielos
por esa forma clara
de verte en estos versos,
temblando y sin distancia.
besos besos
MISHA
lg
Gracias Misha.
Abrazos.
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